TRAS LA VENTANA...
Caminando por el valle
Tan luego de mucho andar,
Rodeado de mil detalles
Que la natura nos da...
He divisado a lo lejos
Un sitio sensacional,
Lleno de flores, de helechos,
Cerros, árboles y más.
A medida me acercaba
Me di cuenta que era un bar.
Una preciosa cabaña
Con una vista brutal.
Todo compuesto en madera,
De forma tradicional,
Con una rústica bella
Dándole un toque especial.
La tarde ya en avanzada,
La noche no tardará,
Una hostería buscada
Que estaba justo detrás.
Poca gente, muchas mesas
Pero mí vista fugaz,
Fue derecho hacia una de ellas
Y allí me supe sentar.
Al instante frente a mí
Una linda señorita,
Me saludó y dijo si...
Qué desea que le sirva?
Mejor le dejo la carta
Para tranquilo decida,
Llámeme luego, soy Carla
Y he de venir enseguida.
La tomé entre mis manos
Para saber qué ofrecían,
Yo me sentía cansado
Después de la travesía.
Pero habiendo tantas cosas
Tarde mucho en decidirme,
Entonces llamé a la moza
Y por fin pude pedirle.
Allí distante asomaba
Muy pequeñín el lucero,
Porque el sol ya se alejaba
Del lado opuesto del cielo.
De pronto cual de la nada
Aparecían estrellas,
Y la luna enamorada
Mostrando su luz tan bella!
El inmenso firmamento
Era un telón muy oscuro,
Con todo lo que les cuento
Y aquí se los aseguro!
Comí y tomé lo pedido
Con una paz increíble,
Mientras sonaba en mí oído
Una música imperdible.
Llegó el postre y el café
Que por cierto era muy rico,
Y al rato le pregunté
A Carla por aquel sitio...
Es decir... Por la hostería
Para allí pasar la noche,
Hasta que asi el nuevo día
Ya recargado en derroche...
Desayunar y partir
Continuando mí camino,
Me explicó y allí me fui
Pues los dueños eran los mismos.
Como casi no había gente
Me dieron la suite central,
Completamente imponente,
No creo exista otra igual!
Un cortinado gigante
Casi del techo a los pies,
Cubriendo muy elegante
De pared a la otra pared.
Un aire acondicionado,
Tele inmensa para ver,
Un frigobar bien cargado
Hidro, ducha en el toilette...
Y un sin fin de todo un poco
Para muy bien disfrutar,
Pero no solo... Ni loco!
Acompañado... Genial!
Mas ese no era mí caso,
Sólo con mí soledad,
Me di una ducha en el baño
Y cuando abrí el ventanal...
El asombro me cubrió
Porque vi un cuadro real,
Tan fantástico que yo
No podía imaginar.
Me acosté en la inmensa cama
Con esa vista genial,
Me dormí y en la mañana
Desperté con el cantar...
De aves que rama en rama
Volaban en el lugar,
Ahí detrás de la ventana
Con el sol que volvió a estar!
Ésta historia que les dejo
Es de treinta años atrás,
Y nunca jamás he vuelto
Pero el recuerdo ahí está!
Espero que si han leído
Le haya sabido agradar,
Les doy las gracias y digo...
Sean felices!... No más!
Luis A. Prieto
28/11/2024
20:04 hs.
Bs. As.
Arg.
🇦🇷
**
*
- Autor: Lualpri ( Offline)
- Publicado: 28 de noviembre de 2024 a las 20:18
- Comentario del autor sobre el poema: Gracias por estar, queridos amigos. Les deseo mucha paz, salud, felicidad y amor! Luis.
- CategorĂa: Cuento
- Lecturas: 28
- Usuarios favoritos de este poema: JosuĂ© GutiĂ©rrez Jaldin, alicia perez hernandez, Tommy Duque, Antonio Pais, FRANCISCO CARRILLO, Andrea-R, MarĂa GarcĂa Manero 🌸, Scarlett-Oru, Mauro Enrique Lopez Z., EmilianoDR, Dr. Salvador Santoyo Sánchez, JosĂ© LĂłpez Moreno., JacNogales, MarĂa C., Antonio MartĂn, Hugo Emilio Ocanto, Alexandra L, Jaime Correa, Soponcio, Freddy Kalvo
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. RegĂstrate aquĂ o si ya estás registrad@, logueate aquĂ.