En el último suspiro de estas páginas,
yace la crónica de la mujer doliente,
que talló sufrimiento en cada línea,
sus penas entrelazadas con tinta ardiente.
Este libro se cierra con un susurro,
pero el eco de su dolor perdura,
resonando en las sombras de mi alma,
recordándome que el sufrir no se apura.
Algunos capítulos no se borran,
sino que se vuelven parte indeleble,
de la historia que fue vivir,
un testimonio de lo que es ser sensible.
Así el tiempo esculpe nuestras vidas,
en cada palabra, en cada herida,
pero aún en la oscuridad,
la esperanza brilla, renace, reverdece.
-
Autor:
Asad (
Offline) - Publicado: 12 de marzo de 2024 a las 16:24
- Comentario del autor sobre el poema: Este poema es un viaje íntimo a través del dolor humano, donde las palabras son puentes hacia el alma.
- Categoría: Perdón
- Lecturas: 15
- Usuarios favoritos de este poema: Omaris Redman, José Valverde Yuste, alicia perez hernandez, jvnavarro, Nitsuga Amano, Mauro Enrique Lopez Z..
Offline)
Comentarios3
"Algunos capítulos no se borran,
sino que se vuelven parte indeleble,
de la historia que fue vivir,
un testimonio de lo que es ser sensible."
Buenas y sentidas letras!
Así el tiempo esculpe nuestras vidas,
en cada palabra, en cada herida,
pero aún en la oscuridad,
la esperanza brilla, renace, reverdece.
...
Bellos versos que nos llevan a la reflexión porque en si la memoria en ocasiones se exterioriza y se queja de tanta carga que le dejamos, interesante tema has abordado. saludos poeta
Aunque sea larga la noche y no camine hacia el día, como decía Shakespeare, existe la esperanza de la salida del sol. Hermoso saludos
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.