PAZ DEFINITIVA

Carlos Justino Caballero

 

Siempre lo quise, y lo supe siempre …

 

Que las lágrimas matizadas de sonrisas

eran fugaces hontanares

que nutrían las tristezas de la noche

y que en su intensa mirada  

serían frescura del soñar del alba,

y que sólo escuchar la gracia de mi nombre

saliendo en susurros de sus labios

haría de las sonrisas, gestos puros.

 

Todo lo hice sueños y busqué esos sueños

sabiendo que ellos romperían piedra y hielos

saltarían barrancos y embravecidos ríos.

Que seguirían a la alondra y al zorzal

que saben de amar…

Y como hiedra me adherí a ellos

para que fueran la paz definitiva.

 

Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos


Comentarios1



Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.