Agua dulce,
en tu mansedumbre yaces,
agua salada, en tus profundidades,
anhelo de amores perdidos, lamentos de guerras.
(La marea se alza con inmensidad ante la tormenta,
cuando el viento clama, la tempestad se calma,
y el mar cesa su movimiento violento).
Agua añeja,
anhelante de la luna,
donde anida la esperanza y acecha la muerte.
En tu vasta inmensidad,
destacan aquellos que regresan,
sobreviven a tu averno,
encontrando la salvación en tu abrazo.
El agua calla secretos,
inunda aliento,
su frío y distante contacto con el cuerpo,
trasparente en su interior, azul en su superficie.
Agua.
- Autor: Augusto Fleid (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 18 de febrero de 2024 a las 13:23
- Categoría: Naturaleza
- Lecturas: 33
- Usuarios favoritos de este poema: jvnavarro, Rafael Perez Ortola, Patricia Aznar Laffont, Lale Neda, José López Moreno., SOY.-, Roel Ybañez, José Valverde Yuste, Omaris Redman, Lualpri, Golpe de mar, Salvador Santoyo Sánchez, Martha patricia B, Lucila De Melo, Starlight, Texi.
Comentarios2
Lírica en estado puro, belleza has escrito!
Muchas gracias Patricia:3 por disfrutar del poema y visitar esta humilde mesa
Algunos, presienten al mar como un enigmático útero, de algo que somos.
por más que nos aventuremos, el mar nos expulsa.
Un abrazo.
Esteban
Muy buenos versos colega que hoy nos compartes y bastante cierto.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.