No están locos, locos serían felices, están alienados.
Quizá sea una manera de felicidad o solo su manera de pretenderlo.
Quieren que siempre te muestres sumiso, sean agradecidos te dicen y usan el poder como pivote en
sus relaciones.
Pretenden que su síndrome paranoide modele está sociedad.
Te dan discursos victorianos, pero uno a uno no te ven a los ojos, saben que serían descubiertos en su miedo al olvido, al no haber nacido.
Son burdos controladores de todo lo que se mueva y morirán inmediatamente se jubilen.
Su terapia es la ocupación y no se ocupan de lo suyo.
Deberían de buscar su proyecto de muerte personal, una pareja, un libro, escrito, leído o fumado.
Nunca podrán sufrir cambios reales y su muerte tenderá a ser prolongada.
En todo caso es muerte, pero la suya será en vida, que es diferente a una muerte decente, sana, y final.
Extraviados, busquen una muerte felíz, porqué quieren llegar sanos a la muerte, no podrán ni valdrá la pena.
No finjan, mejor sufran sanamente.
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Autor:
Roberto Vásquez (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 25 de enero de 2024 a las 18:41
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 16
- Usuario favorito de este poema: jvnavarro.
Offline)
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