A los pies de la cruz vi,
cómo silvestres lirios nacían,
crecidos por un invierno
que a la primavera precedía.
Ingenuos, mis ojos luego,
¡creyeron en un estío eterno!
Pero fue mirarte y comprender,
que el invierno había muerto.
Al fondo un blanco marfil,
!mi pueblo y mi cuna¡
Gente, campos y calles
la esencia de mi fortuna.
Por este abismo vuela mi locura,
aún impregnada de los versos
que a esta misma cruz
le pedía con mis resos.
Y al fin tú, agarrada a mi cruz
con mis huellas de fondo;
siempre fuistes de mi alma
el deseo más hondo.
- Autor: poetalibre ( Offline)
- Publicado: 24 de enero de 2024 a las 07:33
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 11
- Usuarios favoritos de este poema: jvnavarro, Omaris Redman, Texi, alicia perez hernandez.
Comentarios4
Muy buen poema compañero. Un abrazo con la pluma del alma
Hermoso poema con un dulce cierre, saludos cordiales estimado Poeta, feliz miércoles,
Me gusto mucho la energia de tu poema, y el final genial, gusto leerte!!
PRECIOSOS VERSOS QUE SE APRECIA EN SU LECTURA.
SALUDOS POETA
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