JESÚS EN MI VIDA

 

JESÚS, a mi claudicada vida llegó

como solsticio  en mi trópico de letargo

tan añoso y oscuro ..    tan   vacío de auroras

que  después   de la hora  borrascosa

mi alma  errante y   confundida,  encadenó

a su Eterna  Sonrisa Bondadosa.

 

JESÚS,  a mis  noctámbulos  ojos,  miró

como  suave céfiro  en su  búsqueda

de algún  nómade corazón  de incertidumbre

que en vano    el horizonte  mira..

el vendaje   de mi  larga ceguera,  cayó

a su  Piadosa  Mirada  de  Amor.

 

JESÚS,  a mis estólidos  oídos,   cantó

Su Palabra  de Agua Viva

Estremeció  los confines  de mi  ser

Iluminando  la  última sombra

de mi  noctámbula y  sosa vida,

un  celestial  susurro,  escuché…

“Dios en Cristo te Ama”

 

JESÚS, de mis ojos y oídos

De  mi torpe boca,  de mi vida  poca

Tu Santa Misericordia,  hallé

en Tu Palabra y  sufrimiento en la Cruz

no tenía camino ni plan eterno

sólo largas  discordias  y luchas inútiles

hoy arrepentida,  Tu Santo Evangelio,  escuché

sembrando  paz,  y  nuevas  ilusiones

de una  prístina  dimensión  de luz

que antes,  de mis  desventuras,   no conocí.

 

JESÚS,  de mi alma en pena

De mi  ruda soledad   no te alejes,  jamás

sujétame a tu Divina Cadena

sola  no me dejes en el fango,  caer más

líbrame de la anarquía  mundanal

llévame con oración de Fe, a tu Reino Celestial

que resucite  mi alma  contigo

sálvame  de las tinieblas y  no morir sin Amor

Jesús,  mi Dios, mi Gran Amigo.