Del amor y los poetas

 

Del amor y los poetas

Tres poemas
con versos polimétricos
y sin esquema fijo de rima.

Poeta

Poeta...
Susurros de un sueño.
Poeta...
Corazón sediento,
como ese niño que sueña
vivir en un cuento eterno
sin tener miedo del lobo
que viste piel de cordero.

Poeta...
Bálsamo que arrastra el viento
hasta el corazón que sufre
por amores un infierno.

Poeta...
Como esa voz que nos grita
cuando se calla el silencio,
como la ilusión que crece
a la sombra de un recuerdo.

Poeta...
Un Quijote medio loco
y otras veces medio cuerdo,
algarabía de vida...
Y del amor... Es su dueño.

Poeta...
La rama de un frágil sueño,
regada con amor y delirio
y la fragancia de un beso.

Poeta...
Agitador de los vientos,
que forjan esas caricias
que nos alivian el alma,
el domador de silencios
en el circo del recuerdo.

Poeta...
Como un reloj sin cuerda.
El soñar que nadie sueña,
esa luz que ilumina la senda
cuando el camino se pierde
y la muerte ronda cerca.

Poeta...
La esperanza y la locura
meciéndose en una nave,
sin timón, ni arboladura
en su rumbo hacia levante.

El amor... ese sueño

Amor...
nave de la fantasía,
casco puro y cristalino,
por corazones ardientes navegas,
despliega tus blancos linos,
cubre las almas y anega
de pasión y ternura sus bodegas.

Hay un desaliento de amor
en el suspiro fragante
cuando perdemos un beso
sobre un hueco vacilante.

Construyamos de amor un sueño
de ternura galopante,
hagamos de la palabra verso,
saciemos la sed 
del amor inconexo
en el amor principiante.

Como canción sin letras
o guitarra sin cuerdas,
como sangre sin corazón,
como almas vacías, muertas,
sin besos hay dolor
y poesías de frío yertas
cuando se muere el amor.

Soñar y soñar despierto
no es nunca una mala chanza,
es un aliciente abierto
al mundo de la esperanza.

El amor y el pájaro

El Amor y el Pájaro
en un mismo vuelo
del amor hablaban.

Versos y trinos
a la vez sonaban
en el azul cielo
del candor del alma.

Bálsamo para el corazón,
aliento y calma.
Viviendo...
la pasión de cada momento,
haciendo... del amor razón,
llenando de paz el alma
con sueños robados al viento.

Con cada verso un poema,
cada caricia una rama,
rama a rama, sueño a sueño,
escalera que hace verso,
como música que arde,
como arde en la boca un beso.

Y el Amor y el Pájaro,
en un mismo vuelo
con el amor soñaban,
mientras hablaba el alma,
como solo el alma, hablar sabe,
hablar sin hacer agravio,
haciendo del amor milagro.

El Amor y el Pájaro
en un mismo sueño, 
los dos volaban...

Mercedes Bou Ibáñez