Poco a poco, se llenan los cráteres
de luna llena, con viejas encinas.
Quien dice cráteres, dice avisperos,
donde el alma se retuerce, sin disipar
sus dudas o tristezas. No, uno no escapa
de sí mismo. Se estancó la aventura,
y la lagartija, bajo las piedras,
duerme a la espera de su siguiente presa.
Rezan viejas beatas su romance por las tardes.
Hay un odre vacío y una bañera llena,
aunque la voz acumule ecos de otras tardes,
y los vencejos acudan a otras iglesias.
No sé a quién espero, pero espero a alguien-.
©
- Autor: Ben-. ( Offline)
- Publicado: 10 de septiembre de 2023 a las 23:04
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 8
- Usuarios favoritos de este poema: Nitsuga Amano, alicia perez hernandez, Omaris Redman, Lale Neda, Mauro Enrique Lopez Z., Lucila De Melo, David Arthur.
Comentarios3
Estamos conectados mi querido Ben, justo acabo de escribir unos versos con algunas palabras usadas por ti en este publicado, espero que nadie diga que es plagio, jajajaja, saludos cordiales amigo,
Jaja increíble pero cierto!! Un abrazo y gracias Omaris...
Cuan difícil es a veces disipar las tristezas y nos llenan de hoyos nuestro ser...Abrazo desde mi Alma estimado Ben
Gracias a ti Lale. Un abrazo!!
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