*** Así es el amor *** Soneto esdrújulo

Fabio Robles

 

Así es el amor

El amor tiene visos enigmáticos
nos conduce por sendas metafóricas
que recrean las páginas eufóricas
empañadas con párrafos dramáticos.

No permite los hábitos dogmáticos
limitantes de prácticas pletóricas
o castrantes de mentes alegóricas,
el amor prevalece en altos áticos.

Su bandera es un símbolo poético
que requiere de magia siempre empática,
sin envidia ni cántico patético.

Necesita algo más que la gramática,
es verdad, es franqueza sin cosmético,
su ilusión debe ser siempre pragmática.

 

Ver métrica de este poema
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos Novedades semanales


Comentarios5

  • Omaris Redman

    Excelente estructura y soneto! Saludos cordiales amigo Poeta Fabio, feliz viernes,

    • Fabio Robles

      Muchas gracias por tu buen concepto, agradecido de tu amabilidad de siempre. Feliz Viernes de Poesía.

    • Alejandro Diaz Quero

      Gracias por compartir tanta belleza ,un gran abrazo.

      • Fabio Robles

        A ti , gracias por tu participación siempre positiva. Gracias amigo, Alejandro

      • Corazón de Bohemio

        Magnífico.

        • Fabio Robles

          Gracias por tu esdrújulo comentario. Saludos amigo

        • Lale Neda

          Nos brindas un soneto melódico impecable ..con buen sentir.... gracias por compartir tu pluma ...Abrazo del Alma

          • Fabio Robles

            Muy buen galardón me das. Muchísimas gracias.

          • José Luis Galarza

            Buenísimo!!! Me encantó!!!
            Trajiste a la memoria una canción de Viglietti.

            Esdrújulo

            Daniel Viglietti

            Se trata cósmicos de ser más fértiles,
            de no ser tímidos, de ser más trópicos,
            de ir a lo pálido, volverlo térmico,
            sentirse prójimo de lo más lúdico,

            con verdes lápices trazar el ámbito
            de lo que mágico rompe los límites,
            buscar lo hidráulico de lo volcánico,
            librar la métrica, cambiar de sílabas.

            Y con elásticas formas anárquicas
            tocar lo afónico que suene homérico,
            fundar metáforas, crear la hipótesis
            de que lo asmático se vuelva oxígeno.

            Situar la brújula al sur paupérrimo,
            armar las síncopas contra los déspotas,
            cambiar la tónica por una séptima,
            tocar en triángulo sones esféricos.

            Y a los dogmáticos tan poco orgásmicos,
            casi ni eróticos de ser tan púdicos,
            a esos acríticos de sesgo andrógino
            decirles "gélidos, no sean retrógrados".

            Y con armónicos cantar bien nítido
            contra lo frígido luchando tórridos,
            con armas múltiples llamando cálidos
            fondos oceánicos de lo más lúbrico.

            El ritmo cíclico del vals esdrújulo
            es cual la sístole que va a la diástole,
            todo cardíaco de andar eufórico,
            nada presbítero, más bien sacrílego.

            Amando nínfulas que sueña grávidas,
            el vals acróbata cruza los vértices
            llamando gráciles criaturas prístinas,
            seres prolíficos de lo aún inédito.

            Y a los arácnidos volverlos líricos
            y a sus ejércitos juzgarlos rápido
            mediante un árbitro de juicio ecuánime
            que encierre en cárceles impunes pérfidos.

            Y los políticos de gesto tránsfuga,
            los impertérritos, los siempre cómplices
            caerán patéticos en lo espasmódico
            cuando lo enérgico les corte el tránsito.

            Con lo poético del vals arrítmico,
            que está en lo crítico de sus propósitos,
            no pueden síncopes ni golpes fúnebres,
            ni es por patíbulos que quede acéfalo.

            Ni es por trifásicas que olvide históricas
            luchas titánicas por lo inalámbrico,
            por lo que ubérrimo se alza eufórico
            y anuncia próximos cambios históricos.

            Cuando el pobrísimo tome las cúpulas
            y los famélicos tomen las Áfricas
            y los indígenas tierra amazónica
            y los mecánicos tomen las fábricas
            y los utópicos salgan del prólogo
            y los daltónicos pinten lo nítido
            y los chuequísimos bailen de júbilo

            ya lo terrícola será libérrimo
            cual ritmo cíclico de un canto esdrújulo.

            • Fabio Robles

              maravilloso aporte con el que participas. Muchas gracias por tus conceptos. Abrazo



            Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.