Lenguaje de señas.

Tu voz, seguramente sería alguna canción de The Beatles, o la guitarra de Slash, sería un café a las dos de la tarde junto a un libro de poemas de Neruda, sería lo que más me gustaría escuchar cuando no quiero nada, cuando la vida se convierte en bruma. 

Si tu voz fuera un color, sería el arcoíris entero fundido en el cielo, sería el calor que brindó cada óleo con el que los artistas pintaron sus mejores obras, tu voz sería color de flor, aroma de lirios, y mil aves en vuelo. 

Tu voz podría cambiar el clima y pondría mil guerras en paz, apagaría incendios y a la vez quemaría mis ganas de saber todo aquello que quieres decir y no puedes, todo aquello que quiero decirte y no puedes escuchar.

Tu voz podría curarme, hacerme amar la vida, quitar mis ansiedades y desvelarme de alegría. 

Hoy por hoy, tu voz, son tus ojos de asombro cuando de pronto te encuentro en cualquier lugar, es ese abrazo que me brindas, que se siente como casa y las ganas de sentir tu piel en cada beso dulce que pones en mi mejilla. Es cada "buenos días", con tu tímida sonrisa.

Quiero gritar que te daría todos mis sentidos, para enamorarte con una bachata de Juan Luis Guerra, para que grites de emoción, para que bailemos con los ojos en las estrellas, con los pies en la tierra y la mano en el corazón. 

Tal vez en otra vida, un día vengas a mi diciendo "hola" en las mañanas y un rayo de sol salga de tu boca y de besarte, me arranques las ganas.