El olfato del cannibal
Rastrea a modo mariposa de la muerte
Su tendencia compulsiva
Quema el mundo, y a su gente
Luz suprema en el búnker
Abduce sus teorías irreverentes
Y conducen al transeúnte
A la exención del confidente
Rosa del mar embriagada
Destruye puentes y genera odiseas
Y en la niebla espesa de la alborada
Se crean mitos y panaceas
Pulcra litúrgica que balancea
El ritual sobre la escaces de su fé
Congrega tácitas actitudes de monjes, que se pelean
Por su fanatismo y afán de poder
Come carne cruda de madres
Sin necesidad de rechistar
No llora muertes ni desmadres
Su maldad ha de engordar
Pálpito indecente que permanece
Bajo las ojeras de su crueldad
Con sangre en las manos, enseña sus dientes
Su lugar, es la no libertad
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Autor:
Pedro Antonio Borges Rodríguez (
Offline)
- Publicado: 29 de marzo de 2023 a las 18:29
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 23
- Usuarios favoritos de este poema: Tarr de Issis, Omaris Redman.
Comentarios1
Uff uff, ese título! 🫵🏻 Jsjs
...cannibal buscando carne... devorando todo a su paso...
Sii, jeje. Gracias por el comentario
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