Nuestro tiempo

Weryl

Es una agonía dulce y lenta tenerte cerquita de mi, pasa haciendo revuelo entonces, este probable y ansiado futuro que nos dibujamos en las mañanas.

 

 

Dime, de esas tardes que caminamos juntos aún en la distancia.

 

 

Hace algunos ratos de este día me pediste que no perdiera la fe.

 

 

Es la única que tengo lo sabes, me muero cada vez que te siento en mis piensos y yo en los tuyos y nos encontramos para luego completar frases del otro.

 

 

Dime de qué se trata todo esto?

 

 

Por qué a nuestra lejanía le rodea la incertidumbre de volver a verte aún que jamás lo doy por hecho,

además de poner suma atención en la canción siguiente, donde seguro te haces presente esperando que el coro    

diga: “…hoy vamos a vernos”

 

 

Y así se nos pasan los días con muchas ganas de ti y de qué nos cuentes la,

tan nuestra,

hermosa historia de amor que pareciera está pasando por el clímax de su cuerpo.

 


Tus mensajes directos dicen -no más; el último desde hace mucho, pero cada salida de sol nos cuidamos y seguimos cariñosamente el rumbo del día y saltamos al enfrentamiento  el uno por el otro.

 

Es como un cuento de hadas con el arrebato y la total entrega desde el primer beso.

 

Cuantas vicisitudes le deparan a nuestra historia que sin haberlo imaginado, me arranca los segundos de manera despiadada debido a no llegar al que rogamos que sea nuestro tiempo?

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