El escupido...
(ojo, él me escupió) sabiendo que yo algo haría).
¿Quién es amor prohibido?
¡Cupido!
¿Y el amor qué es verdadero?
¡Espero!
¿Lo qué nunca he de negar?
¡Amar!
No me paro a meditar
ni vergüenza he de sentir
si me río al escribir...
¡Qué a cupido espero amar!
....................................
La ley del embudo.
¿Qué demuestra la erección?
¡Pasión!
¿Y el que rápido se viene?
¡No tiene!
¿Qué le dices por saludo?
¡Cornudo!
Si usas la ley del embudo
hay que tener muy presente
que podrá decir la gente...
¡Pasión no tiene el cornudo!
.........................................
La condena del Cornudo.
¿Qué siente el qué gana cuerno?
¡Infierno!
¿Porqué le arderá la piel?
¡De infiel!
¿Qué no dice el joven mudo?
¡Cornudo!
Siempre repite el saludo
el mudo con esa dama
que dieron por justo un drama...
¡De infierno al infiel cornudo!
..................................
Artículo del mulo.
¿Lo amparas en un artículo?
¡Ridículo!
¿Y qué razón te sostiene?
¡Lo tiene!
¿Qué talento tiene el mulo?
¡El culo!
Que no cepillo ni pulo
pero para verlo bien
hay que ver que con sutién...
¡Ridículo tiene el culo!
.
Autor: Mario Rodolfo Poblete Brezzo. -ADUV-
Muchas Gracias a Todos.
-
Autor:
Mario Rodolfo Poblete Brezzo (
Offline) - Publicado: 14 de marzo de 2023 a las 02:48
- Comentario del autor sobre el poema: Espero arrancar alguna sonrisa.
- Categoría: Humor
- Lecturas: 56
- Usuarios favoritos de este poema: Tommy Duque, Omaris Redman, Kapirutxo, Miguel Ángel Miguélez, José Luis Galarza, Daario.
Offline)
Comentarios5
Yo sí me reí, no a carcajadas porque aquí la gente duerme.
Al llegar al pie quebrado tenía la expectativa del final de la redondilla. Y del tema, pues, mejor no digo...
Saludos, Mario.
😀👌 Muy feliz y contento que así haya sido, Crystal.
Un gran abrazo ☺️
Quise reírme, intenté...
pero yo, ¡No! No lo haré
¿Pregunta sin saber qué?
Por qué
¿En el corazón un nudo?
¡Cornudo!
¿Y Quién le respondió?
¡Soy yo!
Reírme se me antojó
mas mi garganta afiné
pues no me rio, ni reiré ...
¡Por qué el cornudo soy yo!
🤣🤣😎
No para nada, Aprendiz.
Tu estás lejos de ser ese personaje.
Pero si, eres muy galancete.
Disparas a todos lados😅 Pero está bien el que no se arriesga no pasa el río 😀
Gran abrazo, Luis Ángel y gracias
Jajajaja... Pues más de una, unas cuantas... Todavía me estoy riendo con la ley del embudo jajajaj Buenísimos, Mario 🙂
Un gran abrazo, Poeta, y gracias por las risas. 🙂
Jaajajjajaja...No pude encontrar los cuadernos en donde tengo otros más nuevos y tan divertidos como estos.
La ley del embudo es muy bueno, Miguel Ángel, uno de los mejores que escribí hasta aquí.
Muy feliz y satisfecho de haber logrado que rieras, Miguel Ángel.
Un gran abrazo, Poeta.
Qué divertidos Mario... Recuerdo algunos de estos. Un abrazos.
Si, José Luis, publiqué tres de estos el año pasado y el otro "la condena del cornudo" lo escribí este año y anoche lo encontré en un cuaderno borrador que tengo dónde estoy, y en mi casa tengo los cuadernos de ovillejos, pero no di con ellos, porque tiempo que voy muy poco y no he ordenado hace rato.
Estoy solo a 70 metros, pero no quiero ir y no sé porque.
Voy solo a regar y alimentar mi mascota y no entro la verdad.
Pero seguro se me pasará.
Son etapas, amigo mío.
Me costó varios meses subir al dormitorio de mi Madre, que es mío ahora, pero no quiero estar mucho ahí, ya pasará, siempre es así conmigo 🙂
Gran abrazo, José Luis.
Un rato más publicaré un intento de soneto guía 🙂
jejeje
Recién pude escaparme para leer un poco... y ya me has alegrado el día.
Gracias Mario por tu ingenio y naturalidad... siempre sera un placer leerte.
Abrazos fraternos a la distancia.
Yo feliz de alegrarte el día 🙂 Daario.
Estos ovillejos son reeditados, porque los publiqué el año pasado, pero solo tres y uno lo escribí este año, hace muy poco y lo tenía en un borrador, porque escapando ando jajajaja...de mí casa, lo que me ha hecho muy bien, la verdad. Que me interrumpían demasiado por tonteras más que nada y aquí no, porque pocos saben donde estoy a pesar que solo estoy a 70 metros 🙂
Mi Madre con sus cosas, que dejó algunas instrucciones y algunos techos más para mí jajajajaja...huyyyyy...que Señora!
Abrazos fraternos para ti, Daario.
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