A mi niño Santiago

Hola! Santiago! ¿Qué tal? Te escribe tu papá, quizá te resulte extraño éstas palabras escritas pues soy el ogro, el malo del cuento. Soy el enemigo de tu vida. Soy el ser antologico que siempre conociste, soy ese ser a vencer a cada día. Soy ese enemigo para el cual te preparaste toda la vida, soy al que nunca pudiste vencer,soy el verdugo de tu día a día, soy más de lo que ayer fui.

 

Total Santiago, soy yo el que te escribe. Tal vez me equivoque pero estoy más que seguro que a estas alturas apenas conozcas de mi,apenas conozcas que detrás de aquel enemigo se escondió un amigo. A estas alturas la vida me ha arrebatado tus mejores logros y se ha quedado con tus peores momentos, solo soy un hombre cuidando a otro hombre, azahares del destino,el dios de todo me mandó a ti para mí y te amé.

La alegría que dejaste en mi ser, jamás nadie lo logró.

Inventé mil poemas, dibujé mil lienzos pero solo tú llenaste mi ego,mi Boca y corazón.  

Caramba! Para cuando tú comprendas esto quizás mi cuerpo se ha vuelto ceniza de la que alguna vez fui y solo renací para verte crecer.

Una disculpa si en mi intento fracase,creelo que di el mejor de mis esfuerzos, conmigo ni siquiera lo pensaron, contigo fue todo por el todo.si fallé lo pagaré,si tuve éxito, lo gozaré.

Encuentra a una buena mujer,jamás la más bonita,eso viene y va y lo que se queda es el sentimiento (ta' madre, ella es la más hermosa del mundo)  Yo encontré a tu madre y tu madre me dio a ti.

Si algún día te preguntas donde estoy...Escucha a tu madre, fíjate en la forma en la que habla, en la manía que tiene en tocarse el cabello cuando algo le apasiona, sus ojos cuando algo le asombra,la risa que le da cuando reta y la sonrisa cuando está más que segura y su inquietud de seguir aprendiendo....ahí estoy yo. Contigo.