Una lágrima tuya …

Una lágrima tuya ardiente no era bella, era la belleza misma.

Pero ya sabes que solo soy el aliento dentro de una botella.

Leeré tus sentimientos en  la fuente del poder de mi soledad.

Me expandí en el espacio de la vida y te esperé ignorando la esperanza sin saber que es un Monstruo y nosotros su juguete que sé rompe poco a poco.

Somos Reyes de tramas trágicas, quizás, almas perdidas dentro de nuestra propia historia.

Quiero esta noche beber hasta caer en un sueño permanente y soñar que estoy muy vivo, porque solo existimos si somos visibles para otros.

En realidad soy un idiota con una extravagante mala suerte que a nada le haya sentido.

Quizás porque desearte es un arte embaucador, que clama el deseo de tú corazón.

De sobra sabemos que el deseo más cruel de todos es siempre derrotado por una tontería.

Lo confieso y lo digo muy alto, he evitado contar mi propia historia a mi mismo.Igual que tú eres fuego yo soy ceniza.

Gozaba siendo tú prisionero y aún así me dejaste para ser nada en un sorprendente vacío.

¿ Como puede ser un error amar a alguien del todo ?

El deber de mi corazón es amarte  y que nuestras soledades se unan para que nuestros anhelos deseados sean realmente una locura maravillosa.

Oí el susurro de las estrellas que murieron hace años y si embargo no puedo olvidar el final de aquel último día que tú y yo vivimos a la luz de la Luna.

Eres mi posible imposible, soy lo que soy y tú un obsequio del amor verdadero.

Manuel Lorente

Seudónimo

Mael Lorens

Reservado el derecho de Autor

Diciembre 2022