Inmadurez

mikaiasc

que agotador es querer caerle bien a todo el mundo, querer estar bien con dios y con el diablo

que cansador es dar mil vueltas, e incluso mentir, para no decir lo que verdaderamente tenes dentro, por miedo al que diran

que horrible es manipular esta obra de teatro llamada vida, para no perder el protagonismo, y para que vos no dejes de ser mi coestrella por miedo a estar solo, por caprichos, por obsesiones, por amor

y pensar que toda mi vida lo hice;

cuando cuando tenia 5 años y les dije a mis compañeros de jardin de infantes que tenia una tarantula de mascota solamente para impresionarlos y que me inviten a jugar en su mesa

nunca funcionó, siempre fue mal, pero siempre lo intentaba como quien espera las cosas, como gallina sin cabeza, como una oveja al matadero, en el fondo de mi sabía que todo lo que construía de esa manera tarde o temprano se iba a derrumbar.

ahí esta ese niño, colgándose de la pierna de su mamá, llorando y gritando porque quería ese juguete

la madre, por otro lado, con una cara de exhausta, que me da la sensación de que no es la primera vez que ocurre. simplemente lo ignora, ya no tiene palabras que decir a su hijo

luego de ver la escena y ratificar mi odio a esas clases de situaciones, me di cuenta que tengo un niño interior que hace lo mismo

¿cuantas veces no lloré, no me revolqué por el piso, no grité, no hice un berrinche para que vos no te vayas?

¿cuantas veces no me tire enredandome en tus piernas para que vos no puedas caminar en paz?

me merecía un "buen golpe" (diría mi madre) de la vida.

en unos años ese niño va a crecer, y se va a dar cuenta que ya no puede hacer esas cosas, que ya no es acorde a su edad y a nueva "madurez"

pero lo va a canalizar de otras maneras, de otras formas, más "adultas y solemnes"

solo espero que no sea de la malas maneras, como las mías

no es una justificación hacia mi inmadurez y mi impulsividad

simplemente, me di cuenta, que al menos yo todavía tengo un niño inmaduro, caprichoso y malcriado dentro

un niño que canalizo todos sus impulsos, todo lo que no le gustaba y no estaba de acuerdo en malas actitudes quizás imperdonables o al menos yo todavía no me las perdono

al menos agradezco esta cachetada de la vida, porque a este niño jamás le importó lo que perdía, siempre le dió igual todo

pero cuando encontró algo que realmente valía la pena para el, y no lo quería perder… lo perdió

ahora se dió cuenta que es momento de crecer

probablemente no deje de ser un impulsivo y muchas veces un caprichoso, pero la cuestión es canalizarlo de una manera distinta, más sana para todos

es una lastima que haya necesitado quemar la casa, chocar el coche, destruirlo todo, perderlo todo, para darme cuenta y volver en sí, para cambiar

espero no volver a lastimar a nadie, espero no volver a destruir a nadie, espero no volver a tirarme en las piernas de nadie para que no se vaya, espero no volver a manipular esta obra de arte, ya no me importa si soy el protagonista o el personaje secundario

espero que la vida me de una oportundidad de redimirme con vos

pero por el momento, luego muchos pedir perdón, de muchos arrepentimientos, noches sin dormir lleno de ansiedad, es hora de cruzar, apretar el pecho, y seguir.

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Comentarios1

  • Zapalandia

    Me ha gustado leerte poeta, la vida no es fácil...
    saludos cordiales



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