Cartas que nunca te envie

Mi vida, tomare un segundo de mi tiempo solo para poder redactar estos sentimientos que se resguardan en mí,

su esclava, su amor, su eterna servidora lo extraña profundamente,

y no es un secreto que solo por usted respiro,

ya que es vida de mi vida, el dueño de mi corazón,

me siento cansada, triste, vagabunda de deseos, ausente de fantasías,

siento que su sola presencia encendería el mechero encarcelado por tal tristeza,

sé que solo usted lo sabe, porque le he resguardado mis más oscuros secretos,

¡Oh mi vida !, siento que me han quitado el privilegio de ser feliz,

Y con su ausencia, solo espero que la muerte resguarde mi dolor,

Despierto cada día con la esperanza de que el infinito invierno desaparezca,

Que la noche oscura sea reemplazada por el negro de tus cabellos,

Y que lo único que me quite el sueño sea el café amargo de tus ojos,

He reemplazado el silencio por música, pero nada se compara con la melodía de tu voz,

Mi tacto se olvida poco a poco de la armonía de tu figura,

De tu respiración, el calor de tu aliento.

 Completamente suya,

Samantha