He visto alguna estrella perdida entre las nubes refugiarse bajo brumas distantes e imposibles. Triste cual cautiva que vive en enjambres de luces que a lo lejos anuncian la partida
La vida no permite tiempos largos ni lágrimas ni amargas despedidas. Y como aquella estrella que muere cada día no oculta su desdicha ausente de mentiras
Hay voces que pronuncian enormes lejanías y olvidan que las penas propagan los espacios que son sombras disipadas, al igual que las estelas que se pierden cual olvido en la distancia
Se apagara un día nuestro cálido remanso sin permitirle tiempo al ignominioso canto que se roba taciturno los espacios que ocupan sin permiso nuestras vidas
Y al final solo nos quedara romper las cadenas que oprimen o quiebran los esquemas que no permiten liberar el alma de opresiones, amarguras y de penas
La vida no permite tiempos largos ni lágrimas ni amargas despedidas. Y como aquella estrella que muere cada día no oculta su desdicha ausente de mentiras
Hay voces que pronuncian enormes lejanías y olvidan que las penas propagan los espacios que son sombras disipadas, al igual que las estelas que se pierden cual olvido en la distancia
Se apagara un día nuestro cálido remanso sin permitirle tiempo al ignominioso canto que se roba taciturno los espacios que ocupan sin permiso nuestras vidas
Y al final solo nos quedara romper las cadenas que oprimen o quiebran los esquemas que no permiten liberar el alma de opresiones, amarguras y de penas
Rafael Blanco López
Derechos Reservados
Derechos Reservados
-
Autor:
Luis Rafael (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 1 de marzo de 2022 a las 13:40
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 15
Offline)
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.