Carta de una madre

Iván González Martínez

Que las hojas de este pero 

Que sembramos juntas hace años

Se nos marchiten en febrero

Si no te digo que te extraño.

 

Si no te digo que las distancias

Con "D" mayúscula intensa

Se han convertido en aguas densas

Que crueles, me disipan tu fragancia.

 

Si contara yo los años,

Enemigos de la proxemia,

Ni las cepas de la pandemia

Igualarían su tamaño.

 

Sin rebuscar tanto, te extraño,

Y la vida es muy corta

Para no vivirla contigo,

Para prescindir de ese abrigo

Que solo tus brazos me aportan.

 

Pero alejando lo trivial

Y centrándome en tus misivas,

Hoy me pongo a la ofensiva

Y mi juicio te quiero dar.

 

Eres feliz, tú me dices,

Pero, ¿Eres feliz? Te pregunto.

En el tiempo que llevan juntos

Solo lo material me describes.

 

Carro, casa, dinero,

Comidas, salidas y bares,

Adornos, zapatos, collares,

Hoteles, lujos, sombreros.

 

Tarjetas él te regala

Y tú gastas sin medidas,

A él le dicen Rey Midas

Con 70 años en las espaldas.

 

"El amor no tiene edad"

¡Qué frase tan mal hecha!

Dime si de Cupido, una flecha,

Con él tú has sentido, de verdad.

 

¿De qué color se torna el cielo

Cuando te toca de madrugada?

¿Cómo combina una piel arrugada

Con una de 20 febreros?

 

¿La mañana es más radiante

Cuando tu boca él te besa

O quieres quedarte tiesa

Y que una bruja lo espante?

 

¿La luna más redonda,

Las estrellas elegantes

O te sientes como tonta

Cuando van a los restaurantes?

 

¿Cuando su barba encrespada

Te roza la mejilla,

Te sientes enamorada, chiquilla,

O te sientes muy desdichada?

 

La vida, en bandeja de oro,

Una vez te puso al amor verdadero,

Pero tu obsesión por el dinero

Ya te brotaba por los poros.

 

Esa noche quedé perpleja

Y aún recuerdo con dolor

Cómo ignoraste aquel amor

Y te quedaste con la bandeja.

 

Muy llena tu cartera

Y muy rico tu elevador,

Pero más rico es con amor

Transitar la vida entera.

 

Yo, tu madre,

Sí creo en las miradas

Que arrancan las raíces.

Sí creo en los tonos grises

Como parte de la jornada.

 

Creo en las caricias,

En los abrazos apasionados,

En los cuerpos apretujados

Y en los besos que te asfixian.

 

Creo en la poesía,

En los "te quiero" al oído,

En dos cuerpos envejecidos

Contemplando su día a día.

 

Creo en orgasmos a patadas

Con ese hombre que amo,

Creo en dulces y en ramos

De rosas recién cortadas.

 

¡Ay, hija mía!

Qué bello el amor, de verdad,

Sin que medien cuatro pesos,

Sin que el alza de los ingresos

Te opaquen la claridad.

 

Ya para terminar,

A la sombra de este pero,

Te doy consejo sincero

De mi concepto de amar.

 

Amar es reconocer un canto

Dentro de todas las voces del universo,

Amar es vestirse de versos,

Es secar con tus dedos un llanto.

 

Amar es claroscuro,

Fiesta de luces y sombras.

Amar es paseo en alfombra

Tras un destino inseguro.

 

Pero amar no es interés,

Con poses de mujer falsa.

Amar no es mostrarte descalza

Para que te vistan los pies.

 

¿Eres feliz, hija mía?

¿El vino se vuelve añejo

Cuando a su lado lo pruebas?

¿De veras tú sientes que vuelas

Cuando te besa ese viejo?

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  • Autor: Ivann (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 9 de enero de 2022 a las 20:44
  • Categoría: Carta
  • Lecturas: 48
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