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No me gustan las despedidas, 

pueden ser casuales, o no 

pero siempre se llevan una parte de ti,

te guardas algo de aquello,

crees que la vida es bella,

algo dentro de ti,

que no puede ser expresado, 

que es como el amor,

que se siente,

pero esto no tiene descripción,

no es como el amor,

al contrario, solo daña,

pero me he acostumbrado,

y a veces nado en mi tristeza,

cuando la melancolía esta en mi oídos,

solo hace bulla,

diciendo que escriba de ella..