EN EL PRECIPICIO

He estado en él desde el principio. 

¡Creía que volaba! . 

 

   No me di cuenta:

¡te había regalado las alas!.

 Y las guardaste entre la arena de los besos primeros,

y los infinitos, guardados durante años, 

esperando el momento. 

Guardadas entre tu poema,

las alianzas  y mi dibujo. 

 

Solo tú has sabido

follarme

el cerebro

y  en todo mi yo.

Nos desnudamos el alma

y nos los amamos.

Las almas. 

Y los cuerpos. 

 

Y... Resulta que todo eso. 

¡¡Está en mi!! ¡Yo soy! 

 

Ni puedo decir todavía que no te amo. 

Y decir te odio siempre escondió la necesidad de ti. 

Ni siquiera te odio. 

  ¡Qué contradicción!

Rodeada de miles de palabrerías románticas  que contrariaban los actos. 

Ni yo como mujer.

Ni yo como madre. 

Ni cómo persona. 

No respetaste: nada. 

Ni a tus propios hijos a los que usas de escudo y arma. 

No sabes. 

No sabes tomar responsabilidad afectiva. 

Ni quieres. 

Aún así: Lo acepto como de quien viene. 

Algo me tiene INMENSAMENTE

FELIZ. 

Hoy:

Te perdono. 

Hoy:

Me perdono. 

 

Ambos lo sabemos. 

Dan igual los tiempos.

Dan igual las vidas que hayamos vivido. 

Seguimos en deuda. 

Has sido mi hijo, mi padre, mi madre, mi hombre

y mi gran amor durante siglos.

Eran tus ojos.

Te he visto y tú  has visto los míos. 

Dan igual todas las vidas. 

Seguimos en deuda. 

Tú, conmigo. 

Yo contigo. 

 

Siento mucho no haber sido la mujer que esperabas para esta vida. 

Desde lo más profundo de mi alma herida  conectada a tu alma herida. 

En esta vida, quería ser tu mujer, no maternar hombres grandes. Tampoco eras mi padre. ¡Qué forma de activar vidas completas, heridas abiertas e infancia no lloradas! Quería sentirme cuidada y protegida en tu abrazo regenerador. 

 

Te quería como un  hombre, macho, adulto a mi lado.

Te elegí una y mil veces como compañero de vida. 

 

Soplar al viento. 

Es lo que queda. 

Pedir deseos soplando al aire de nuestra ventura. 

1º deseo. Decreto.

Tu sanación, la de tus heridas.

(las mías, las lamí muchos años).

La libertad del ser para elegirme de nuevo en esta vida o NO.

       2º.  Decreto

Mi sanación completa. 

      3º. Decreto

Tu libertad.

La mía.

 

No es lo que quiero. 

Es lo que por salud de los 5, debo. 

Te dejo ir porque te amo...y aunque te desee... Te suelto. 

Me voy, MÁS ME AMO A MÍ. 

¡He aquí el aprendizaje que llegó¡

Asteroides, señales, estrellas.Nos vemos en la próxima vida. Espero que también en esta. 

 

P. D.: He construido un puente. Han sido 8 años.Es fuerte. Sólido. Cómo yo.

Desde lo alto del precipicio... ¡salto! ¡Sobre mi puente!..atravieso, cruzo, agradezco, bailo, paso, voy, sigo, continuo, sonrío, me asomo, no tengo miedo y  llego al otro lado. 

ME AMO.

NOS AMO. 

LIGERA. 

oo En el tiempo oo