Tres colores

Mírenlas más llegar cuáles cartas del tiempo

para este hombre pleno,

una noche, la manifestación vi anonadado,

otra noche, otra aparición me tomo descuidado,

realmente nunca se me pasó por la mente,

sucesivas se meten a mi descanso en trance.

Vamos por suelos de mantos verdes

suelos verdes nosotros de mantos vamos,

las puras sombras se quedaron,

masculino, féminas, no soltaron sus manos.

Cortéjame, me dicen ellas 

después de ellas cortejarme,

debajo de sábanas, debajo de estrellas

me veo erudito de sus señales.

Comodidad, carisma es el calor de un cuerpo,

cabaña con chimenea me veo dentro

plena lengua abraza paleta siento,

un roce es un incendio.

Pecho frente pecho fortaleza de corazones

o corazones despechos sin fortalezas,

invención majestuosa experiencia aquella,

"un nuevo" chakra: apasionado, apasionadas.

Sarcasmos, indirectas bien directas

especiales miradas goteaban viscerales,

concentración y desconcentración

sacrificio en aguas termales.

Resortes NEGROS flecos se meneaban 

ojos en forma de avellanas acostadas,

vestido azul de bordes negros,

negros cabellos largos podrían ser solo su vestido; bello cuervo,

decidida mirada que decía: te como entero,

la creación decidió remarcar sus cejas

que finura, que salvajismo en un lugar mismo,

se movía como semilla de girasol en el aire,

sus labios me absorbían el estrés; la sangre,

portento de beldad su voz me suena 

energía infinita mi lujuria y amor para ella.

Cabello esponjado NARANJA sátiro atardecer

su mirar terapia de relámpagos he imanes,

definidos pómulos articulando labios con caramelo,

mi peso y su peso nesciencia sin lógica,

magia parte ciclos me hace sentir perfecto

me sentí su primero, ella cuida a su guerrero;

tan difícil es describirla

se me quedo su chispa el brote de su rostral distinta,

ahí la veo atrás del hielo, hielo hecho de déjà vu, déjà vu pastor de los recuerdos.

Amarillo más que vivo, rubio rubí AMARILLO

sus chinos elegantes son toboganes

con muchos finales,

a su cara, a su espalda, bien derechas;

a su frente tabla en brillos bañada arriba del otero,

pestañas asustadoras de polvo, polvo en mi cerebro,

la "v" de su vientre misiva diligente 

a mí, contestación y experiencia vigente,

sus curvas atrapan al ritmo de la mejor manera,

delicadeza, cadencia, necia descalza 

obsesiva por ser la última en mi vida.

Las tres de piel clara, amores de otras existencias,

Tal fue su pasión, los vivos colores de sus cabellos, 

el trato recibido, que en esta vida aún las recuerdo.

Desde el primer cruce de palabras en distinta época cada una,

pero intensidad de momentos asta lo último,

de vez en cuando dan visita en turnos

y no solo quieren un saludo.

Jhonnatan López Aguilar®