Las maniobras militares No son ninguna broma Son peligrosos azahares Como una difícil toma Veinte años de guerra Inútiles para nada La puerta de la paz se cierra Y no aparece un hada Afganistán ha tenido muchos regímenes Monarquías, repúblicas y dictaduras Lo único que ha sobrevivido son los crímenes Y por todo el país sobreviven las pobres criaturas Tuve la suerte de conocer el desierto Cuando era una colonia de España Ha pasado mucho tiempo pero es cierto Que la arena, los camellos y la gente no me resulta extraña
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Autor:
argantonio (
Offline) - Publicado: 1 de septiembre de 2021 a las 06:33
- Comentario del autor sobre el poema: Yo como militar soy un desastre una vez me dijeron que había que tirar al blanco, intenté ser el último en disparar pero no sé donde cayó la bala, hay una verdad con mi espíritu de combate no habría guerra. Saludos y feliz miércoles a todos los amigos del Alma
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 19
- Usuario favorito de este poema: Augusto Cuerva.
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Comentarios4
Lo triste de mi corta estancia en el antiguo Sahara español fue que un día paseando por su capital El Aium vi un grupo de camellos ante una vieja casa, extrañado por aquella visión, pregunté el motivo y la respuesta fue dura, iban a ser sacrificados porque eran el alimento de los saharauis, cuesta trabajo creer que un animal que tan buenos servicios presta tenga un final tan triste, pero así es la realidad de la vida en el desierto. Saludos y feliz miércoles
En Abu Dhabi y otros emiratos existen también camellos pero los tienen en algún secarral fuera de un lujoso hotel porque los antiguos propietarios están cómodamente instalados en apartamentos de lujo con grifos de oro, a la mayor gloria de Alá pero acá. Saludos
Augusto Cuerva, hice el servicio militar en la marina, como hablaba inglés fui el intérprete en el primer simulacro de un desembarco en la playa de Mazagon en la provincia de Huelva, pero cometí un error me presenté con el uniforme oficial y el mando superior me dijo, pero usted hoy aquí no es militar usted hoy es un invitado entonces como no sabía qué hacer me subí a la tribuna de autoridades y aquello fue un desastre, la tribuna se hundió en la arena con todas las autoridades y yo no sabía dónde meterme, tuve suerte pero no quiero que esta aventura se repita. Augusto Cuerva un verdadero placer compartir estas líneas contigo
Carlos Armijo Rosas, no sé si vivir muchos años es una ventaja, aunque prefiero no hacerme esa pregunta , hace unos 30 años conocí un chaval rubio que tendría cuatro o cinco años lo subí sobre mis espaldas y lo pasee¿ Quién me iba a decir que aquel chaval terminaría combatiendo en la guerra de Afganistán? Afortunadamente pidió la baja por motivos de salud y regresó con su familia. Carlos Armijo Rosas un placer comunicarme contigo
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