*** Mi corazón *** - Relato - - Autor: Kavanarudén - - Interpreta: Hugo Emilio Ocanto - - Grabado -

Hugo Emilio Ocanto



Abro mi pecho. Introduzco mi mano derecha y busco mi corazón. Un dolor agudo, intenso siento. Lo tomo en mi mano, lo aprieto y lo extraigo al exterior.

 

Siéntome desfallecer, pero es lo que realmente quiero hacer.

 

Mi corazón, ese corazón fiel, que me ha acompañado durante todo estos años, que ha amado hasta la saciedad, que ha soñado, ese músculo al cual he atormentado por largos años con mis cambios de humor, melancolías, rabias, rencores, no solo amores, lo confieso; lo tengo frente a mis ojos.

 

He odiado, he matado con sólo una mirada. Mis palabras, flechas afiladas, en algunas ocasiones han asesinado. Mis actitudes han destrozado, destruido...  Me confieso ahora delante de mi corazón palpitante.

 

La sangre brota a borbotones, es cálida, siento que la vida poco a poco me abandona.

 

¿Por qué este gesto loco? Quería verlo, quería tenerlo en mi mano y confesarme delante de él.

 

Sigue palpitando. ¡Cuán fiel eres amigo y compañero! Sí, sé que estás cansado, cansado de la vida, del eterno palpitar, pero dentro de poco el tormento te abandonará para siempre.

 

¿Dios tendrá perdón de este pecador confeso? Condena perpetua merito. Tanto amor donado, dado y yo a ti te he abandonado, propio en la cruz como los otros. Te he pagado con el ignorante por exigente.

 

 

 

¡Oh dolor intenso que me desgarra dentro!

Cóbrate poco a poco, lento, el mal que yo he hecho.

No tengas compasión, no, desgarra mi pecho.

Morir quiero, toma lo que hay por dentro, el centro.

 

No quiero pedir clemencia, no la merito.

De pie, erguido, mis brazos extendidos, quiero,

vivir varonilmente este mi vil destierro.

Sea mi último acto, entregarme, en este rito.

 

Siento quemar mis entrañas, ¡Es muy intenso!

Apagándose mi intelecto, lo que pienso,

mis rodillas no resisten aunque si tenso.

 

Me sumerjo en el lago de mi propia sangre.

¡Maldito el día que nací! Herido cual tigre.

Dejo que mi alma lentamente vaya, emigre.

 

Sumergido en una espantosa oscuridad.

Una mano vi en medio de la soledad,

Ven hijo mío, premio tu gran lealtad.

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Comentarios7

  • María C.

    Hermoso todo
    Si Kavi estábien es lo principal, pero espero Kavi nos pueda de nuevo entregar su arte, como tú tienes el tuyo, recitando.
    DOBLE ABRAZO

    • Hugo Emilio Ocanto

      Gracias, María.
      Ojalá pueda regresar Kavi.
      DOBLE ABRAZO.

      • María C.

        Ojalá Hugo Emilio.
        Petons

      • Hay 1 comentario más

      • Yajaira Vargas

        Hermoso sentimiento que cala en lo más profundo de mi ser, maravilloso trabajo y un noble gesto el de interpretar tan sentidas letras del compañero Kavi..
        Un abrazo para mis estimados Hugo Emilio Ocanto y a mi querido compatriota Kavi

        • Hugo Emilio Ocanto

          Muchísimas gracias por acompañarnos, Yajaira.
          Un abrazo, poetisa.

        • Freddy Kalvo

          Tu maravillosa voz le da vida a la hermosa prosa escrita por Kavi mi estimado Hugo Emilio. Gracias por deleitarnos con tan generosa obra poética y espero que nuestro amigo Kavi aparezca pronto para que nos comparta el fruto de su inspiración.

          Abrazos fraternales para ambos hasta donde se encuentren.

          • Hugo Emilio Ocanto

            Muchas gracias, estimado y apreciado Freddy.

            Abrazos fraternales de ambos, buen poeta.

          • Libia Sophia RC

            WOW
            Me hizo pensar en Edgar Allan Poe.
            Maravillosas letras, increíble declamación.
            Abrazos poeticos

            • Hugo Emilio Ocanto

              Gracias, LE Colombia.
              Placer nos acompañes.
              Abrazos poéticos.

              • Libia Sophia RC

                Abrazos de vuelta.

              • David Arthur

                No conocía este relato muy bueno y muy sentido de Kavi, interpretado maestramente por Hugo Emilio.

                Abrazos fuertes amigos poetas
                David

                • Hugo Emilio Ocanto

                  Muchas gracias por estar, apreciado y querido amigo David.

                  Fuertes abrazos, poeta.

                • alicia perez hernandez

                  Siempre es un gusto escucharte mi querido amigo Hugo, y esta vez lleva fuerza declamando lo maravilloso que nuestro buen Kavi nos comparte. FELICIDADES!! una entrega que vale la pena leer y escuchar. Abrazos para ambos

                  • Hugo Emilio Ocanto

                    Siempre grata tu presencia y tu alentador comentario, Alicia.
                    Un gran placer nos acompañes.
                    Tal vez podamos tener a Kavi con nosotros pronto.
                    Abrazos de ambos.

                  • Jordi Etresi

                    Me sorprendió la verdad ya que Kavi siempre lo he leído mas como algo espiritual en sus letras y justo este sin desmerecer no crei fuese de el y es que de tormentos todos sufrimos, ojala este pronto o al menos este bien, excelente declamación

                    • Hugo Emilio Ocanto

                      Supongo que en estos momentos
                      Kavi ha de estar bien.
                      Fue un sentir, en ese momento...
                      Gracias por acompañarnos, Jordi.



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