MOMENTO A MOMENTO

MOMENTO A MOMENTO
 
Gota a gota se derrama,
entre los dedos el tiempo,
como cascadas de ideas,
que rompen el pensamiento.
 
El tiempo me cogió a solas,
perdido entre verso y verso,
y la nube que me oculta,
no quiere soltar al preso.
 
Tiempo que no se detiene,
tiempo que da tiempo al tiempo,
párate para sentirlo,
que no se lo lleve el viento,
que el tiempo que me concedas,
quede grabado con fuego.
 
Perdida quedó la aurora,
entre momento y momento,
ni el canto de los gorriones,
a su huida puso freno,
se encontró la madrugada,
sin apenas darle tiempo.
 
Pasó veloz como el rayo,
como un rayo dejó impronta,
y el rescoldo que quedó,
diole al momento consuelo,
con ciertas gotas de gloria,
como el beso de una madre,
un indeleble recuerdo,
que no borra la memoria.
 
Tiempo que surca veloz,
como el águila en la atmósfera,
con sus poderosas alas,
parte la nube y el viento,
y cada nuevo aleteo,
cambia de forma su sombra,
fija el terreno en su mente,
fotografía el momento,
dando sentido a su vuelo.
 
Cada instante es un tesoro,
que atesora el pensamiento,
ensanchando el corazón,
mímalo como a una flor,
que gratis nos da su aliento.
 
El canto de un ruiseñor,
que con su trino deleita.
Que con un beso de amor,
el que nos quiere refleja.
El abrazo de una madre,
que siempre grabado queda.
 
Momento sobre momento,
construye el hombre su esencia,
y el tamiz con que la filtra,
da sentido a su existencia,
es honrado o sinvergüenza.

Angel L. Perez
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