Mamá

Christian Alondra

Rosa mía
de prominentes espinas,
pétalos perennes
y tallo recortado.

 

Estrella amortiguada,
agonizante.
Sabemos que los
tiempos más brillantes
no vuelven, pasaron.

 

Cadena oxidada,
chapada de plata.
Se distigue
en tus cortes
que fino obsequio 
antes fuiste. 

 

¿Por qué cierras la garganta? 
¿Por qué te atragantaste
de llanto y reprimida 
voz mezzosoprana?

 

Sauce que llora, 
¿te entusiasma seguir vivo, 
sentir la tierra? 

 

Bruja mía, hechicera, 
te ha consumido el desencanto. 
¿Acaso existe algo aún 
que te sorprenda? 

 

Supiste tantas cosas. 
Te fue tan sencillo aprenderlas... 
Mía maestra, 
no olvides que la inteligencia 
es la peor embustera.

 

Concha desgastada
que va rodando
a la orilla de todas las playas. 
Siempre intuímos que el agua
era tu anhelo, tu casa. 

 

Halcón de alas rotas, 
adiestrado para posarse en uno
al tenderle el brazo. 
Ya ni se piensa en el vuelo, 
tal vez jamás se ha pensado...

 

Música de genio frustrado, 
bloqueada, obstruida,
llena de rabia. 
¿Sigues pretendiendo
que no nadas
en ira callada? 

 

Artista mía, 
arrebatada de los sueños
al estar a un paso. 
¿Somos suficiente
aunque no seamos música, 
ni canto, ni gloria, 
ni teatro, ni libertad, 
ni aplauso? 

 

Magdalena nuestra, 
que por más que lloras
nunca te secas, 
¿pudiste hallarlo? 
Encontrar a Dios
en nosotros hurgando. 

 

Sé, vela mía, 
que la cera de tu cuerpo
se consume, 
y que tu llama
es cada día 
más tenue. 
Así nos pasa
y nos pasará siempre... 

 

Pero en mis cristales flojos
te reflejas mil veces. 
En mis vitrales de colores
te proyectas, 
y arrojas rayos
al cielo abovedado. 

 

En mí eres, 
y existes, 
y vives, siempre vives, 
y brillas eterna 
y cantas sin tregua. 

 

En mí vuelas, 
y sueñas, 
y alcanzas
y eres estrella nueva. 

 

En mi encuentras, 
y floreces, 
y todo te sorprende, 
y nada te calla. 

 

En mi mano 
aprieto las espinas
de tu tallo. 
Y sangro, sangro tanto... 
Pero es esa, mi sangre, 
la que mantiene rojos
tus pétalos. 

 

Seré siempre tu agua, 
Rosa mía, 
y mis venas calientes
tus raíces. 
Seré la sal y espuma, 
Concha marina, 
de tus mares, 
piedras,
y orillas. 

  • Autor: Christian (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 8 de julio de 2021 a las 02:22
  • Comentario del autor sobre el poema: Mamá siempre ha sido una mujer brillante, tal vez demasiado. Está como recortada, lo siento todo el tiempo; frustrada con su vida, sus sueños truncos, sus talentos desperdiciados, sus expectativas obsoletas, sus profesiones no ejercidas... y toda esa extensa lista de cosas en las que es excelente y que, por tanto, siente que no las ha aprovechado como debiese. Cada día la veo navegar nuevamente al pasado, una y otra y otra vez. Por ratos se ancla a ello, a los "buenos años" y las "épocas doradas", hasta que el presente la arrastra de nuevo, colocando en sus ojos una desilusión y desencanto permanentes. Observo diariamente como ya nada del ahora le interesa o le sorprende; es doloroso, realmente. Y quisiera enfrentarla de alguna forma, convencerla de que el tiempo no es obstáculo, pero me da tanto miedo, porque ella es intimidante. Sabe demasiado, ha sido y dejado de ser tantas cosas, ha vivido y desertado tanto (en música, canto, derecho, política, consultoría, docencia, tanatologia, terapias alternativas, etc., etc.) Y simplemente a su lado incluso llego a convencerme de que no soy ni sé lo suficiente como para aconsejarle cómo debería vivir su vida. Mamá se extingue un poco más cada vez, está frustrada, arrojada a una encrucijada en la cual tiene dos opciones: o tomar las riendas de lo que se es y lo que se quiere ser o hacerse vieja en ella.
  • Categoría: Familia
  • Lecturas: 228
  • Usuarios favoritos de este poema: Alberto Diago, Lualpri.
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Comentarios1

  • Lualpri

    El de tu madre es un tema muy complejo y de alguna forma entendible a cierta edad.
    Cuanto más nos vamos acercando a la meta, las insatisfacciones se acentúan y comienza a rondar por la cabeza el para qué esto, aquello o tal cosa?
    El gran problema es que uno cada vez se sumerge más en el abismo y sin ayuda psicológica dificilmente se logre emerger.

    Espero que prontamente aflore la solución y que de esa forma pueda revertir su crítico estado.

    Un abrazo.



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