Bienvenida soledad.

Estoy tan deprimida que leí en un letrero «Hoy es un buen día para morir» en vez de vivir.

Dije que no me afectaría esto soledad, pero lamentablemente me siento más triste esta tarde.

Solo escuchaba en la radio el ruido de la licuadora, todas mis escusas para sentirme bien.

El locutor Jean Paul Sartre decía; “Si te sientes en soledad cuando estás solo, estás en mala compañía" y la única compañía que tenía durante mis días eras tú melancolía.

Decidi tener que soportarte, fue difícil lidiar contigo, tus comentarios hirientes en mi cabeza eran más importantes.

— Me caga tus piernas deviluchas.—  (mensionastes cada que me ponía falda)

—Tú sentido del humor tan raro.—

    (por cada vídeo que veía en facebook)

— Odio que veas RuPaul para tener ánimos en redes sociales.—

— Por qué eres tan patética escribiendo poesía en tus estados de WhatsApp.—     

  ( ¿A quien quieres impresionar? )

Entre más te escuchaba más quería alejarme, así que decidí hacerte tus maletas, te aliste tus pensamientos y un buen libro para el camino, te emprendí un viaje de reflexión con excusa laboral.

Lo peor de todo es que tiene un mes que regresaste,

 ¡Ay¡ mi dicha duro poco, venistes mas furiosa que nunca, la reflexión te invadió de irá y entre ella la primera en caer tu venganza es mi cabeza.

La lucha es interna,

El amor propio no me funciona,

El psicólogo solo es una excusa,

Las penas nunca se ban con el alcohol,

Y tú pequeño momento llamado depresión, no sabes cuánta pinche rabia hija de tu perra madre me das.