Hoy vendí mis juguetes… Y no lloré.
Mi papá me enseñó, a ser paciente.
Y a construir; grandes puentes y castillos.
Y me dijo; que si me lo proponía,
Podría construir, hasta llegar al cielo.
Hoy. Mi papa se fue de viaje, sin avisar.
Mi mamá dice, que está, en un bello jardín.
En un lugar llamado cielo. Donde está Dios.
Y tiene nuevos amigos, llamados ángeles,
Que son buenas personas, y lo cuidan.
Hoy comencé, mi propio negocio.
Vendo rica limonada, que refresca.
Con cada venta. Compro un ladrillo.
Y así construiré. Mi propia escalera.
Con ella podré subir, hasta el cielo.
Y darle una gran sorpresa, a mi papa.
Los niños, me golpean y se ríen de mí.
Me insultan. Y no se han dado cuenta,
Que ya llevo construidas, tres gradas.
Y cuando me subo, ya se ve muy alto.
Yo le grito a mi papá, saludándolo.
…Y creo, que él me escucha.
Soy todo un hombre… Y yo le creo a mi papá.
Muy pronto, terminaré mi escalera.
Y le diré… cuanto lo amo.
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Autor:
Sierdi (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 8 de junio de 2021 a las 02:09
- Categoría: Triste
- Lecturas: 52
- Usuarios favoritos de este poema: María C., Lualpri, Alberto Diago, alicia perez hernandez.
Offline)
Comentarios5
Ya pueden reir lo que quieran, cuando esté acabada la escalera, se habrá conseguido lo que se desea.
Muy bello relato!! Un abrazo poeta!
Muchas gracias estimado Alberto.
Me alegró mucho, que te haya gustado.
Lloré un poco escribiéndolo.
Un abrazo amigo.
Es un poema muy sentido, simpatizo con aquella necesidad del alma que nos hace construir escaleras de poesia.
*sin acentos intencionalmente
Soy todo un hombre… Y yo le creo a mi papá.
Muy pronto, terminaré mi escalera.
Y le diré… cuanto lo amo.
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Un día todos los que hemos perdido a nuestros padres tendremos un encuentro con ellos en el cielo. Así lo creo!!
Abrazos y saludos poeta
Yo también lo creo igual.
Un abrazo para mi querida Reina.
Saludos.
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