Ayer caminaba taciturna y triste.
Silente y con lágrimas de dolor;
no creía que tú, de mi vida saliste.
Cómo podría yo verme sin tu amor.
****
Las veredas se me hicieron cortas;
en el largo andar de la despedida.
Lo pienso y no sé cómo lo soportas.
Yo soy fuerte y olvidaré tu partida.
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Muchas veces, con voz clara, dijiste:
Amor, esta será nuestra última noche;
y te vi todo lloroso, pero no te fuiste.
Y aún triste, no hice ningún reproche.
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Hoy, fortalecida como estoy, te diré:
No deseo de ti, una indecisión más.
Sé que toda esta molestia la superaré
y que no me verás, en tal impase, jamás.
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Estuve sola, afligida, llorosa y sin fuerzas.
Te imaginaba lejos, apartado y sin amor.
Y no quiero que tú, mi voluntad tuerzas,
y, mucho menos, llorar por tu desamor.
****
¡La suerte ya está echada, te marchaste,
y con esa acción a otro sino te abrazaste!
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Autor:
Rainajim (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 5 de abril de 2021 a las 13:35
- Comentario del autor sobre el poema: El amor es un intercambio de energías en dos vías, si la suerte, el deseo y el sentimiento las junta, se da el encuentro. Pero, si alguno equivocó el camino y no llega a ese destino deseado, por su afán y deseo, surgirá el desencanto y ambas energías se apagaran o se escaparan, aunque permanezcan en confusión y no en conjunción.El amor nunca se puede obligar, es energía y busca su energía complementaria. Y, aún así, por siempre precisa de un camino abierto.
- Categoría: Amor
- Lecturas: 43
- Usuarios favoritos de este poema: Parley03
Offline)
Comentarios3
"Una vez que tu alma vuela,
aunque te manden a enrejar;
nadie te podrá borrar,
aquello que te consuela".
¿Un amor que se va? ¡Cuántos se han ido!
Otro amor llegará más duradero
y menos doloroso que el olvido.
El alma es como el pájaro inseñero
que roto el nido en el ruinoso alero,
bajo otro alero reconstruye el nido.
Puede el último amor ser el primero.
Mientras más torturado y abatido,
el corazón del hombre es más sincero.
Tras de cada nublado hay un lucero,
y por ruda tormenta sacudido,
florece hasta morir el limonero.
Hermosa y valiente despedida
cuando un amor se despide
no hay nadie que lo impide
ya todo es una historia perdida.
Muy lindo preciosa poetisa
Con cariño
JAVIER
Gracias, me siento una aprendiz,
con los brillantes poetas,.
Pero de algo sirve ser feliz
y, como las flores coqueta.
Un saludote.
Seydel bellas estrofas de Andrés Mata, poeta Venezolanos. Gracias.
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