Imágenes oníricas con magia
penetran la oquedad parsimoniosa
de un espejo de estampa penumbrosa
que tormentos del alma en ella plagia.
Duda por el futuro nos contagia,
esa ignota montaña cavilosa,
con una soledad supersticiosa
que situaciones álgidas presagia.
Dos niños complementan la faena
un coche convertido en pesadilla
que temores seguro concatena.
Este sentir umbrío es la semilla
que provoca el misterio con su pena,
en donde siempre el juicio trastabilla.
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Autor:
Fabio Robles (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 30 de marzo de 2021 a las 13:37
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 74
- Usuarios favoritos de este poema: Rafael Perez Ortola, Jorge Horacio Richino, Daario, Pity21, KORO, Willie Moreno, Lualpri, David Arthur, alicia perez hernandez, SOY.-, amante ilusion.
Offline)
Comentarios6
La magia de los sueños es poderosa, hasta nos transforma las pesadillas en en brotes nacientes para navegar por el misterio.
Saludos cordiales.
Rafael, de acuerdo totalmente, nuestro subconciente funcionando. Saludos amigo.
..buenas leras..como siempre Fabio y ese espejo asusta
Mi abrazo amigo
Gracias amiga por comentar, a mi me asusta pero es por otra cosa, jiji. abrazo amiga.
Muy buenas letras en una maravillosa combinación para el misterio y el miedo,como lo es un espejo y la pesadilla.un abrazo.
Gracias Alejandro, por tu amable comentario, saludos amigo.
Me uno a la voz de Koro, estimado Fabio.
Como siempre, muy bonitas letras!
Gracias.
Un abrazo.
Muchas gracias mi amigo por tu comentario, saludos
Muy bueno tu soneto del espejo de miedo y misterio que penetra nuestras almas con incertidumbre.
Un abrazo a la distancia
David
David, siempre amable con tu comentario. Muchas gracias, saludos amigo.
Dos niños complementan la faena
un coche convertido en pesadilla
que temores seguro concatena.
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unas dos pesadillas he tenido en toda mi vida desde que yo recuerde, pero fue fatal una de ella la recuerdo con tanta claridad que te la cuenta soñé que se metían a robar mi casa y el hombre con un gran cuchillo que brilla en la oscuridad de la noche amenazaba a mi marido lo tenia del cuello y le enterraba el cuchillo y desperté y no podía respirar y mi esposo se despertó y yo le decía el hombre te quería matar y el me dice calma, calma es una pesadilla. Bueno disculpa pero no soy amante de las pesadillas. saludos poeta y amigo Fabio. ha sido interesante pasar a leer.
Amiga, no somos amantes de las pesadillas por supuesto, pero suceden y ya ves la anécdota que cuentas debió ser angustiosa y "muchos temores encierra", bueno lo importante es que logré poner a funcionar tu mente, en un camino inusual. Gracias, Alicia.
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