El hombre de arena
A menudo pierdo el tiempo
atándome los zapatos.
Tirado en la cama,
llenándola de arena,
libre del cristal del reloj.
El hombre de arena
me mira desde el espejo,
he intenta elaborar origamis
con sus dedos de nada.
El hombre de arena
mezcla jabón con su esencia,
y se dibuja sonrisas,
ojos expectantes,
lágrimas tan secas
cómo este desierto de arena.
El hombre de arena
se difumina en el paisaje
que me invita a perder el tiempo
antes del final programado.
Cuando la luz se filtre en mi reloj de arena,
y mis granitos
pierdan su validez,
estornudaré el insomnio
y me dejaré llevar al Sáhara por última vez.
Autoría: Ortunyo (Texto registrado)
Comentarios1
bah...veo que no soy el único que cuesta comentarle compadrito...jajajajaj
Así es la vida del rarito😁 que se le va hacer...jejeje
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar [email protected] Regístrate aquí o si ya estás [email protected], logueate aquí.