A ti que me has enseñado a vivir
y también a medir, a juzgar, a mentir
y a interpretar tus deseos y silencios...
A ti que me ayudas a comprender
el estruendo de las tormentas
y las horas pobladas de reveses.
A ti que me dejas amarte de esta forma infinita,
inagotable, inimaginable y sencilla...
Y cuando me pierdo siempre tiras del cordel.
A ti, la que siempre al final se ausenta
para que yo aprenda a interpretar lo que su corazón
me cuenta, lo que resbala de las pupilas de sus palabras.
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Autor:
Angel Valles (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 16 de agosto de 2010 a las 00:48
- Categoría: Amor
- Lecturas: 87
- Usuario favorito de este poema: nellycastell.
Offline)
Comentarios1
Muy sentido e inspirador tu poema lleno del más inmenso amor, te felicito amigo, un abrazo
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