22 de diciembre 1979

José Luis Barrientos León

 

 

Pensar que trasciendes, como la noche que nos conmueve

Con tu imagen que desfila, por el pasillo antiguo de mis memorias

Pensar que nos desnuda la soledad, con sus extáticas llamas

Repitiendo su ritual por días, meses y años

 

Pensar que esa muchacha eras tú, que ese joven era yo

Que nuestros besos descendían al fondo del alma

Seduciendo de pasiones rebeldes,

las sombras silenciosas de nuestros cuerpos desnudos

 

Pensar que existía una pareja, conociendo el amor sincero

Sin reclamos a los espíritus infantes que se despojaron de atuendos

Pensar que nos construimos uno al otro

En el universo infinito de tu cuerpo junto al mío

 

¿Por qué la noche nos entrega reflejos de sangre?

Asesinando en ella todas las estrellas

Para que la historia nos muestre su semblante fúnebre

Y exhale el abandono en décadas de olvido

 

Pensar que eras tú, pensar que era yo

Los que volamos al azul celeste, los que abrazamos las montañas

Los que silenciosos en las sombras, procreamos cuatro ángeles

Y con sus ojos introvertidos conquistamos cielos marinos

 

Pensar que fuiste tú, pensar que fui yo

Los que desgranamos los lamentos

Los que construimos el muro

Los que derribamos el sagrario.

 

Ver métrica de este poema
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos Novedades semanales




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.