El arquetipo de Ícaro

Francisco S.

¿Quién soy yo para jugar a querer volar? Un simple mortal que al estilo de Ícaro pretendía llegar al sol. Aquel que te ofrecía sus alas rotas acompañadas de una taza de café amargo todas las mañanas.

En palabras del mismísimo Neruda: “Para tu libertad bastan mis alas”. Está frase la has tomado muy literal que al huir arrancaste mis extremidades superiores junto con un trozo de mi espina dorsal, impediste que planeara y provocando una caída en picada.

Estás palabras no son de odio, son de amor… Sí, del inicio de un cariño hacía mi propia persona, provocando que surgiera de nuevo de entre los escombros de un templo derribado, de entre el carbón de un hogar reducido a cenizas, de las cuales como ave fénix iniciaría una vida entre las nubes y el viento.

Siempre olvido que no nací siendo un ave, así que la libertad de los cielos se la dejo a ellas mientras que yo aprenderé a vivir en la tierra, siempre un paso a la vez, un pie delante del otro.

  • Autor: Sofá Cósmico (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 3 de octubre de 2020 a las 14:56
  • Categoría: Reflexión
  • Lecturas: 23
  • Usuarios favoritos de este poema: mariapdfoxa, Vogelfrei.
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Comentarios1

  • ..........................

    Qué bien su prosa, poeta. Un gusto leerle.

    • Francisco S.

      Muchas gracias, esas palabras nos animan a seguir trabajando, estamos a la orden



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