Sumida en el demiurgo de otros tiempos
Recordando mí andar de calle en calle
Cuando era fugitiva
Y me apodaban la peligrosa
Sumida en la valentía de mi pasado
Donde muchas veces fui aprendiz de loca
Recalentando ideas en secreto
En mi infatigable lucha
Por alcanzar otras razones
Jamás se me olvida
Que era una muchacha igual que todas
Cambiando señales y fantasías
En la intensidad de la palabra
Hace más de veinte años que inmolé la calma
Y agolpé mi rabia contra toda injusticia
Entonces la mujer peligrosa
Reconstruyó motines y vigilias
Desatando sus caballos más veloces
Y fui a parar como muchos
Al barranco del ostracismo
Mientras a mi diestra
Sirenas y verdugos
Patrullaban las vías
El graznar desgarrador
De los grilletes y la rejas
Se clavaban en mis impotentes sienes
Hoy a mi memoria
Llega el clavicordio de esa época
Con su brillo peculiar y despiadado
También cuando frente al mar me encontré sola
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Autor:
Adela (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 1 de octubre de 2020 a las 13:53
- Comentario del autor sobre el poema: ESTE POEMA COMO TODOS LOS ANTERIORES ES UNA DESCARGA EMOCIONAL EN HONOR A TODO LO QUE PUEDE SUCEDERLE A UNA PERSONA CUANDO TIENE QUE ENFRENTAR MUCHOS MOLINOS DE VIENTO, JUNTO AL DOLOR Y A LAS POCAS MANOS QUE SE EXTIENDEN. ADELA
- Categoría: Sociopolítico
- Lecturas: 22
- Usuario favorito de este poema: jose S.W..
Offline)
Comentarios2
👍
La soledad cuando se asienta en nuestro razonar nos convierte en un remolino azotado por los vientos de la sin razón.
Un beso cariñoso.
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