Pesadilla (Soneto)

QUINSONNAS

 

 

 

Girando en espiral por mi conciencia

de noche una psicosis me amilana

y elíptica, mortífera y kafkiana,

me tiñe con un manto de impotencia.

 

Nocturna me destroza la prudencia

siquiera sin dejarme algún mañana

y expone con su atmósfera malsana

vapores de una insomne irreverencia.

 

Feroz, su paroxismo, es indecente

volviendo a mi coraje un moribundo

inmerso en la maldad de su semilla.

 

Empapa de sudor mi cuerpo y mente

y en vida es un delirio de inframundo

llamándose, de nombre, Pesadilla.

 

 

Ver métrica de este poema
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos


Comentarios2

  • Raúl Carreras

    Espectacular, como siempre. Perfecto ritmo y cadencia.

  • alicia perez hernandez

    SI DE ESTE TAMAÑO SON LAS PESADILLAS.... De inmensos e intensos VERSOS.... CON SU BELLEZA DE INFRAMUNDO.



Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.