Hombre triste no mira luna ni un cipote.

lúdico

Digamos, un ligero estado de obnubilación.
Donde la mirada, se oculta tras de sí misma.
No tras la salobre catarata lacrimosa y húmeda
en la selva oscura y densa de una frustración.

Supongamos, la luz negada a ojos tristes
surcando el cielo Desde oriente hasta el poniente.
Con la justicia de los astros; no divina: reticente.
Bajo el arco funesto y secreto de la presunción.

Imaginemos a todos los que aman desposeídos.
De sapiencia, de bienes, de nación y de fronteras,
incapaces de ver la libertad enlutada en la ceguera
erigiendo sórdidos imperios de eternas soledades.

Soles, dorados ojos, sublimes, de tonos crepusculares
demorad el cruel réquiem que la existencia de mi ser denigre,
dad el ansiado consuelo de la luz, a mi alma desértica.
Y la lumbre de tus ojos, adornados por pétalos de piel de tigre.

«De la luna, tengo no más, una vaga ilusión borrosa de su efigie.»
Pertinaz, alguna que otra noche insiste en hacerme una elegía
Padeciendo conmigo sus fases, en desmesurado sufrimiento.
Complicando el transcurrir del tiempo, pesadumbre en mi agonía.

Si he de vivir a luz de faro, pronostico solemne mi hundimiento.
Mis pupilas contraídas solo admiten las centellas vitales de tu reflejo.
Tu ausencia cosificó mi tristeza en la osamenta frágil de hombre.

Los surcos inextricables del destino escriben vivaces: advenimiento,
mientras en la oscuridad del túnel, vislumbro la opacidad de los espejos
de cuando en vez, si escucho que alguien dice dios: pienso en tu nombre.

  • Autor: Ludico (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 23 de septiembre de 2020 a las 21:23
  • Comentario del autor sobre el poema: Un instante de rapto y lucidez al mismo tiempo, trajo a mi mente una visión de dos gigantes, uno era ciego y bien hablado y el otro un utópico enamorado, en el ciego intuí una obsesiva aprensión por los espejos y en el utópico la manía de nadar contra la corriente, era febrero 28 de 2019, madrugada en provincia de Buenos Aires, una voraz tristeza eclipsaba mi visión biológica a una luna refulgente, entonces descifré dos claves para sobrevivir dentro de las aflicciones, Borges/Bennedetti.
  • Categoría: Surrealista
  • Lecturas: 26
  • Usuarios favoritos de este poema: Sinediè, Tuyarev, @Muss, alicia perez hernandez, Vogelfrei.
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Comentarios3

  • @Muss

    "Imaginemos a todos los que aman desposeídos.
    De sapiencia, de bienes, de nación y de fronteras,
    incapaces de ver la libertad enlutada en la ceguera
    erigiendo sórdidos imperios de eternas soledades."

    Ah que líneas tan interesantes mi querido poeta, es tarea para desmenuzar. Todo este pensamiento recargado en el surrealismo cobra sentido. Y a destacar la moraleja en el título, aunque es cierto que la depresión es capaz de eso y más, espero exista alusión en sentido figurado, jajaja. Abrazo fuerte

  • alicia perez hernandez

    Soles, dorados ojos, sublimes, de tonos crepusculares
    demorad el cruel réquiem que la existencia de mi ser denigre,
    dad el ansiado consuelo de la luz, a mi alma desértica.
    Y la lumbre de tus ojos, adornados por pétalos de piel de tigre.
    ......................................
    Leí y re leí... Disfrute tu argucia y soltura para trasmitir el sentimiento a la luz de un espejo de viendo dos fronteras sórdidas y soledades... placer pasar a leer
    abrazos y saludos amigo Venezolano

  • Varimar

    Es triste cuando los ojos adornan las pieles de tigre que nublan tus ojos y te impiden ver la belleza de la vida, el regalo del amor, y que sucumbas en la agonía, que una ausencia con fronteras penetre tu osamenta y que cuando alguien diga adiós pienses en su nombre, que no sientas que la realidad fue dulce alguna vez, y que sea la tristeza la que invada nuestros corazones. Triste poema.



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