MUJER con mayúsculas

 

Si alguien me preguntara, le explicaría que no me importa de donde venís, o como llegaste a mí.

Nada más y nada menos que hoy me haces felíz.

Le contaría que sos intensa, libre, independiente, graciosa e inteligente, y también querés y te dejas querer.

Generosa y extrovertida.

Sos fuerte y no pedís ayuda, y realmente podés sola. Pero con un gesto de cariño te conmoves y cuando me abrazas entregas el alma. Toda.

Que no esperas a nadie, que podes ser felíz a tu manera, y que nada va a apagar la luz de tu camino. Pero si te acompañan iluminas hasta el destino.

Que trabajas y soñas mucho. Que te reís y besas fuerte. Y no recurrís a la estética para embellecerte.

Que no necesitas ropa o maquillaje para adornarte, porque sabes que brillas sola, hasta en un día apagado. El placer de conocerte.

Que tu energía contagia al resto, y tu mirada y tu sonrisa invitan al beso.

Que te animas a todo. Y conmigo al amor jugas y te entregas intenso.

Que bailas sola o con gente, un reggaeton o una chacarera, y brindas con lo que caiga en el vaso y con el que fuere, siempre y cuando te respete.

Que tu seguridad, amor propio y voluntad inspira al débil, y enamora a los inseguros transeúntes.

Que No temes llorar ni hablar desde el corazón, porque sabes que eso te sana.

Cuando te desnudas sos natural y paciente. Pobre del que no lo aproveche, cuando reposas en la cama.

Que es un lujo acompañarte, y me dejes acariciarte.

Que enamorado me detengo a contemplarte, sin dejar de disfrutarte.

Porque tenés magia, en tus verdes ojos veo arte.

Que con nuestros cuerpos y deseo, nos desborda el deleite, y con amor y con tiempo, lo que saboreamos queremos que se haga eterno.

Sos volcán, sos avalancha, sos marea incontrolable. Pero también sos cielo, aire y tierra. Apacible.

Porque con todos estos sentimientos, mis pulsaciones regulas.

Sin lugar a dudas, sos una MUJER con mayúsculas.