EN SILENCIO

CARLOS A. VILLABONA

 

En silencio

Se gestan los infantes

En los vientres maternos

Sin ruidos sin mostrarse

En sepulcral silencio

Nosotros los mortales

Bajamos a la tumba

En nuestro último trance

 

En silencio 

Se expresan los amantes

Con besos y caricias

Con mimos a raudales

Exultan de alegría

Con pasión desbordante

En la entrega total

Que dura solo instantes

 

 

En silencio

Circula nuestra sangre

Por venas por arterias

Y alimentan la carne

Dando vida y vigor

Y sin ningún alarde

Cumpliendo esa misión

Del todo respetable

 

En silencio

Producen los trigales

El fruto necesario

Para calmar el hambre

De trigo se hace el pan

En todos los lugares

Y a los trigales gracias

Nadie les dice nadie

 

 

 

En silencio

Las estrellas gigantes

Nos dan luz y calor

De forma interminable

Recorriendo el espacio

Enviándonos señales

Que al prestar su servicio

Son ellas importantes

 

En Silencio

Nos habla a cada instante

La creación entera

Y sin ver su semblante

Reflejan en sus ritmos

En sus grandes contrastes

La presencia divina

En callado lenguaje

 

 

 

En silencio

Se forjan ideales

En las inquietas mentes

De la gente pensante

Y surgen por doquiera

Los cambios transformantes

En toda disciplina

Por bienes o por males

 

En silencio

Elevan los orantes

Sus plegarias al cielo

Los coros celestiales

A Dios tres veces Santo

Entonan sus cantares

Sin pronunciar palabras

Le adoran al mirarle

 

En silencio

Total imperturbable

Ha de permanecer

Quien desee encontrarse

Conocerse a sí mismo

Con lujo de detalles

Principio elemental

Sabiduría innegable

 

En silencio

Sin él es muy probable

Que muera en tu interior                                      

La presencia adorable

De Aquel que habita en ti

Al menos de apartarse

Pues no soporta ruidos

El diálogo entre amantes

 

En silencio

Dejemos los enjambres

De fusiles de minas

De odios agobiantes

Que enlutan el país

Son manos criminales

Almas sin corazón

Cerebros ignorantes

 

En silencio

El consumo aberrante

De potajes y hierbas

De efectos tan letales

Su consumo su tráfico

Habrá que silenciarles

Antes que ellos corrompan

Más pueblos y ciudades

 

En silencio

Siendo perseverantes

Lograremos un día

Vestirnos los ropajes

De paz y de armonía

De amor excepcionales

Que harán digna la vida

De gozos inmortales

 

En silencio

Tendrán que levantarse

Nuestras almas al cielo

Después de los embates

De pandemias de crisis

De mil enfermedades

Presentándole a Dios

Nuestro silencio orante

 

En silencio

Para que el hombre alcance

Sintonía con Dios

Ha de saber callarse

Los ruidos son obstáculos

Y en el amor no caben

Con El hay que buscar

Solo el silencio amante

 

En silencio

Con gozo incomparable

Penetro en mi interior

Sin prisa sin afanes

Y encuentro que allí habita

La Verdad de verdades

Es Dios a quien encuentro

Entre mis vaciedades

 

En silencio

Sin miedo sin ambages

Quedamos los poetas

Dejando este mensaje

De esperanza y confianza

A nuestros semejantes

Ved el amor de Dios

En una cruz sangrante

 

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Comentarios1

  • Alejandro Diaz Quero

    Carlos,me dejastes en silencio con largo poema,se soltó tu musa.un gusto leerte.saludos

    • CARLOS A. VILLABONA

      Gracias Alejandro. Definitivamente "El silencio es oro". Bendiciones



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