Te perdí
cuando menosprecié el ruido
que estabas haciendo entre mis silencios,
antes del pretexto;
en lo frustrado del alcance de mis manos;
en lo viscoso del devenir de un mundo triste
que al azar castiga sin justicia;
en lo difícil que fatiga;
en lo aplazado que sugiere lo imposible;
en la imposición de mi obligada cuarentena
con mi pasado que nos duele.
Me perdiste
poco a poco, culpándome
de los pecados que inventaste;
cuando me implantaste el vestido que aparenta
las suspicacias que te hieren.
Nos perdimos
unidos por un mar y cien montañas
cubiertos del mismo azul,
sin conocernos.
...y aún nos amamos muy profundo
en el amor que desde hoy se desperdicia
en instantes que no vuelven
y que morirá después que yo,
agonizando él conmigo en dos tristezas.
Adios amor
(...tal vez Dios vuelva, nos perdone
y nos obligue en un febrero
al primer segundo del abrazo
en nuestro lugar de la ribera
del río que corre entre las piedras).
#LuisAlbertoR
(Fotografía de Zohre Nemati)
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Autor:
Luis Alberto (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 20 de junio de 2020 a las 17:31
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 36
- Usuario favorito de este poema: alicia perez hernandez.
Offline)
Comentarios5
Nos perdimos
unidos por un mar y cien montañas
cubiertos del mismo azul,
sin conocernos.
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QUÉ BÁRBARO ESTO TE QUEDO DE ANTOLOGÍA... PARA LLORAR DE CHULO Y BELLOS VERSOS.
SALUDOS Y ABRAZOS, POETA
Me agrada que mi escrito motive tus emociones. Gracias por tus palabras, Alicia. Un abrazo.
Son muy nostálgicos tus versos por la perdida de ese amor y profundos...pero quien no ha perdido un amor en esta vida?
gracias amigo, disfruté tu poema un saludo hasta tu hermosa tierra...
Todos los días alguien pierde por primera vez un amor ilusionado que juró ser por siempre en dulces besos. Vive el duelo y sabe que el amor es frágil, difícil y valioso.
Un abrazo, Elenas.
Cuanta intensidad, desazón, y esperanza en el amor. Muy bien trabajado. Un gusto leerte.
Me halagan y motivan tus palabras. Gracias por leerme. Un abrazo, Paolo.
Me estaba perdiendo este hermoso poema.
"Me perdiste
poco a poco, culpándome
de los pecados que inventaste;
cuando me implantaste el vestido que aparenta
las suspicacias que te hieren."
Agradezco mucho tu opinión, Lucía. Viniendo de ti es una verdadera medalla. Un saludo especial para ti desde Bogotá.
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