Bajo el poder

C. Eduardo Barrios (Ex-Toki)


AVISO DE AUSENCIA DE C. Eduardo Barrios (Ex-Toki)
Si no estoy es porque me he ido

…En efecto, aquí se tratará del poder, indirecta pero obstinadamente. La «inocencia» moderna habla del poder como si fuera uno: de un lado los que lo poseen, del otro los que no lo tienen; habíamos creído que el poder era un objeto ejemplarmente político, y ahora creemos que es también un objeto ideológico, que se infiltra hasta allí donde no se lo percibe a primera vista —en las instituciones, en las enseñanzas—, pero que en suma es siempre uno. Pero ¿y si el poder fuera plural, como los demonios? «Mi nombre es Legión», podría decir: por doquier y en todos los rincones, jefes, aparatos, masivos o minúsculos, grupos de opresión o de presión; por doquier voces «autorizadas», que se autorizan para hacer escuchar el discurso de todo poder: el discurso de la arrogancia. Adivinamos entonces que el poder está presente en los más finos mecanismos del intercambio social: no sólo en el Estado, las clases, los grupos, sino también en las modas, las opiniones corrientes, los espectáculos, los juegos, los deportes, las informaciones, las relaciones familiares y privadas, y hasta en los accesos liberadores que tratan de impugnarlo: llamo discurso de poder a todo discurso que engendra la falta, y por ende la culpabilidad del que lo recibe. Algunos esperan de nosotros, intelectuales, que actuemos en toda ocasión contra el Poder; pero nuestra verdadera guerra está en otra parte, está contra los poderes; no se trata de un combate fácil porque, plural en el espacio social, el poder es, simétricamente, perpetuo en el tiempo histórico: expulsado, extenuado aquí, reaparece allá; jamás perece: hecha una revolución para destruirlo, prontamente va a revivir y a rebrotar en el nuevo estado de cosas. La razón de esta resistencia y de esta ubicuidad es que el poder es el parásito de un organismo transocial, ligado a la entera historia del hombre, y no solamente a su historia política, histórica. Aquel objeto en el que se inscribe el poder desde toda la eternidad humana es el lenguaje o, para ser más precisos, su expresión obligada: la lengua…


Roland Barthes

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   No hay otro mal más profundo que el poder, desarticularlo es una tarea conceptual difícil sino imposible al requerirse crear una nueva conciencia con símbolos que en sí mismos constituyen herramientas de tal arrogancia.

   Pero hay que intentarlo, porque al ser humano, a su entorno, le producen daño.

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Comentarios3

  • Esteban Mario Couceyro

    El poder, no es el destino, es solo la consecuencia visible de una situación fáctica.
    Supongamos un esquema de poder, en un caso de las personas de ojos verdes.
    Las personas de ojos pardos (mayoría), presionan y asumen con el modo que sea, al poder, sojuzgando a los otros colores de ojos, creando una prevalencia de los ojos pardos.
    Vemos, a distintos e injustos actores y un mismo poder.

    Un abrazo.
    Esteban

    • C. Eduardo Barrios (Ex-Toki)

      Qué color de ojos han tenido sus jefes.

      Un abrazo

      • Esteban Mario Couceyro

        Algunos con derrames codiciosos, otros, esquivos y poco francos, pero los que más temo, son los de miradas distantes, del color que sean.
        Un abrazo
        Esteban

      • LUIS.RO

        Creo que el poder esta implícito e inherente en la naturaleza, existe en todo orden un mas menos visible estado piramidal,
        dices: " requiere crear una nueva conciencia", ¡de acuerdo!, pero con el concepto final de R. Barthes: "Con el lenguaje"
        haciéndole entender al que ejerce el poder que lo recibe de los de abajo, como los pies sostienen al cuerpo.
        !digo yo!.
        Interesante su tema Toqui. Afectuoso saludo

      • LUIS.RO

        Quiero aclarar sobre el estado piramidal en la naturaleza que existe un dicho "El pez grande se come al chico" y es así como ocurre.
        Y en cuanto al lenguaje ".... se inscribe el poder en el lenguaje" ; hay otro dicho: "darle de su propia medicina" o "la mancha de mora con mora verse se quita" o "el mar de amores con ootro amor se fulmina". Saludos.



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