Lágrimas de un corazón roto

Mirando hoy a esa vieja amiga que en el pasado la veía con gran fervor y que hoy por hoy después de esa noche la observo con mucho rencor...

Cada mañana al salir el sol su brillo acaricia mi rostro que yace sobre esa almohada metiéndome tu imagen en mi memoria como cada día y que seas tú mi primer pensamiento,
y tras del primer parpadeo del día nace la primera lágrima a tu nombre, que recorre dejando su huella por mi mejilla hasta llegar a descansar en mi almohada.

Al levantarme y mirar a esa pared que carga un marco que me muestra tu retrato, me retuerzo emocionalmente de dolor y nuevamente sin permiso invades mi mente torturando mi corazón.

Cuando se reúnen la obscuridad el pequeño invierno y soledad, ella aparece,
siempre bella,
siempre luminosa,
siempre observandome,
en sus visitas de doce horas humedece mis ojos con recuerdos de un ayer que para mí corazón fueron hermosos momentos y para mis sentimientos múltiples puñaladas.

Tuve dos grandes amores,
Mi vieja amiga que estuvo conmigo desde mi primer día y que seguirá ahí aún después de mi muerte,
y tú, que ya pasados dos años que te conozco, y no voy a describirte porque el tiempo no sería suficiente y la muerte no es tan paciente.

Contigo conquien no me arrepiento de lo vivido.

Hoy! Escribiendo en tus recuerdos, con mis lágrimas de tinta y mi corazón de lapicero que viví unos de mis mejores momentos a tu lado.

Contigo conquien no me arrepiento de lo vivido.

Hoy! Culpo a mi vieja amiga que con sus celos hizo que así como lo nuestro comenzó terminara bajo sus ojos y a su merced.

Aquel día las nubes grises celaban ocultando un radiante sol negando así un hermoso día, haciendo que lloviera y que cada gota sobre mi rostro camuflaban mis lágrimas ocultando una evidente tristeza por un adiós.

Al verte negar un posible futuro juntos huyo,
huyo a lo que creo es mi zona de confort,
mi habitación,
que grave error, en ese lugar reside tu esencia en cada rincón,

en aquellos poemas dedicados a tu nombre que me trasnocharon,
en aquella película que vimos juntos en aquel sofá,
en aquel cubierto que se deslizó por tu lengua,
en aquellos colores cómplices de las cartas que te envié,
en mi reproductor cuando pone nuestras canciones,
en aquella almohada que me pregunta por ti noche tras noche obligandome a dormir en ese incómodo sofá,
en aquellas prendas de vestir que me dicen estrañarte y me repiten tu nombre a cada segundo.

Contigo conquien no me arrepiento de lo vivido.

Hoy! Con el corazón en mi mano,
con tu imagen en mi mente,
con tu nombre en mis labios,
con tu perfume en mi piel,
Solo me queda por decirte, que no me haces falta y no te necesito, nunca te necesite, nunca me hiciste falta.

Pero!
si te extraño, extraño cada noche contigo,
extraño tu voz y oírte hablar,
extraño tus cálidos abrazos y la esencia de tu pelo,
extraño aunque pocas y extrañas salidas contigo,
extraño reírnos juntos,
extraño jugar contigo,
extraño tus consejos, tus regaños, tus preocupaciones, tu intelecto, tu amor...

Extraño cada detalle de ti.

Contigo conquien no me arrepiento de lo vivido.

Hoy! Tomo la decisión de guardar mi vida en la mochila y retomar mi rumbo, de buscar la felicidad eterna sin ti.

Pero!
aunque me aleje siempre para ti sin importar nada ahí estaré, ten claro que sí me necesitas seré incondicional.

Te cuidaré aún después de irme como la luna a la noche,
te protegeré como armadura de guerra,
y te amaré como la muerte a la vida...

Adiós!
que tengas una linda vida y nos veremos hasta que la luna nos cite nuevamente.

 

M.💖V.