No quiero soñar que cuando muera,
en el mismo lugar donde he nacido
propondrán ante el consejo de vecinos
dar mi nombre a la mas humilde escuela.
Me niego a pensar en el destino de mis Nardos;
mis herramientas, mis libros mas preciados
estoy seguro, esteran a buen resguardo,
en manos,de quien herede mi gato negro y pardo.
En un necio accionar de narcisismo
me atrevo a imaginar que algún osado
seria capaz de mencionar que fui expulsado
por el párroco local, del catecismo.
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Autor:
Ludico (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 22 de abril de 2020 a las 21:56
- Comentario del autor sobre el poema: Este poema es del siglo pasado —sí— lo escribí a los doce o trece años (hoy tengo 56); desde la fecha hasta ahora solo le he hecho un par de modificaciones, forma parte de un compendio de poemas que yo llamé «Versos de Obreros Y Ateos; año 2007» Es un poema ingenuo, cuyo único fin es la intervención de la palabra como entidad fisiológica. En lo personal siento que expresa las ansias de ser grande de un adolescente, de ser recordado por sus actos insignificantes y en ese mismo contexto recordar a sus amigos. (breve reflexión Buenos Aires 24/4/2020)
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 25
- Usuarios favoritos de este poema: una_taza_de_poesía, Solasdelval.
Offline)
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