HERMANA, AMIGA: MELANCOLÍA.

Al derribar los muros de un oscuro castillo

Algo me decía que allí te encontraría

Tomada la plaza y los torreones, yo

Busqué, entre aposentos y bastiones.

En pozos de agua y cobertizos,  

En los bastos, suntuosos jardines…

Entre las flores que fragantes, sonrientes

daban sus pétalos tersos al sol.

Mi angustia crecía, no te encontraba

Bajé entonces a las frías mazmorras,

Para ver si por ahí te hallaba y, allí

Al fin encontré, lo que a mi vida faltaba.

Lánguida y triste, entre el dolor y la muerte

Con la mirada vacía, perdida en el infinito

Tal vez cumpliendo una injusta condena,

Encadenada a lamentos, así te encontré.

¿Por qué estabas allí?… ¿No es suficiente…

Llevar penas y aliviar sufrimientos?

Te liberé de aquel sombrío lugar y,

Te uní a mi vida, hermana, amiga: melancolía.

Delalma

21/04/2020