Será que somos capaces con la pandemia

Será que somos capaces con la pandemia

 

Será que somos capaces de capotear al toro, que embiste con rabia enfurecido

De eludir las olas gigantes, que azota el mar azul turbulento y embravecido

Será que somos capaces de resguarde cernos de la pandemia, que azota en un caos convertido

De escondernos del vendaval, que arremete furioso en torbellino enardecido

 

Será que somos capaces de derrotar los miedos, saltar las cercas de las dificultades

Del pavor que nos causa estar postrados y de ver de cerca el virus y otras enfermedades

Será que somos capaces de controlar el temor de la pandemia, que marcha a grandes velocidades

El riesgo que nos lleva a ver el camino, del precipicio oscuro de sus profundidades

 

Será que somos capaces de enfrentar el nuevo desafío y derrotar la indiferencia

El reto de alcanzar los sueños, de anhelos sublimes, del esfuerzo y su exigencia

Será que somos capaces de combatir y lograr las metas con llantos de insistencia

El duelo que nos lleva a creer en un Ser Superior, en estos momentos de impotencia

 

Será que somos capaces de prenderle fuego a las cenizas del olvido

De ser tenidos en cuenta sin conflictos, ni rencores de razones comprendido

Será que somos capaces de abandonar los odios, que nos carcomen del espíritu sorprendido

De las avaricias y riquezas, de trabajos oscuros malignos y desconocidos

 

Será que somos capaces de tender un puente y acercar los ardientes corazones

Mantener encendido el pabilo de la llama, que ilumine y aleje las preocupaciones

Será que somos capaces de salir airosos, eludiendo el caos y las confusiones

Evitando el contagio, dejando que los aires llenen los pulmones, de fáciles respiraciones

 

Será que somos capaces de tomar conciencia del contagio y el peligro de su contaminación

Compartir unos días con la soledad, dejar volar los sueños de su imaginación

Será que somos capaces de enfrentar la oscuridad, sin gritos ni llantos de desesperación

Espantar las tinieblas borrascosas, que se ciernen sobre nuestros cuerpos evitando su destrucción

 

Será que somos capaces de contemplar por instantes, la vida que Dios nos dio maravillosa

Contemplar el sol radiante y en las noches la luna llena, de rayos relucientes luminosa

Será que somos capaces de escuchar el cántico de las aves y el revoletear de las mariposas

La majestuosidad de los árboles, dé sus frutos de la naturaleza exuberante y prodigiosa

Sumergirnos en las aguas del riachuelo cristalino, que lleva de sus cascadas caídas vertiginosas

Será que somos capaces de dejarnos arropar, de aquel querer de amores y pasiones esplendorosas.

 

“Joreman” Jorge Enrique Mantilla – Bucaramanga abril 15-2020