De lo imperfecto

Saberse imperfecto
sí
por el contrario precario
y luego saberse humano
olvidar egoísmo
consentir el plomo del aire
omitirse al punto de uno mismo
de la verdad y la no verdad
todas las razones posibles
pero
queda la horma de la incapacidad
lenguaje que carece de telepatía
porque digo: sí
y es sí
para terminar creyendo que se es un neandertal
pero en efecto
el primitivo yo del lejano abuelo
de mi tatataramomia
pero qué más da
la cuestión profunda de cada expresión
porque bueno
el cansarse de la congruencia de uno
la incongruencia del otro
el contradictorio soliloquio sin sentido del espectador
el balbuceo de la impotencia
la diferencia
suplantada en silencio por la infamia
de un antropocentrismo  innato
sostengo lejos de la perfección: llevo una humanidad en el lomo
luego pasa que uno piensa pero bendita anorexia
esa de las palabras
o del cerebro
que su flaqueza corruptible carcome las almas de todos
pero no se diga más
me dispongo a pelear con la incapacidad de ser yo mismo
el yo de otros no
la conjetura
no
abertura en mi petrificada dolencia
seamos uno
seamos la angustia
perdón
quiero decir que no entiendo nada
atorado el silencio
en un coágulo de verbos
libre albedrío
coraza de todos los quiroprácticos
corazón tortuga que no se mueve
distópico cerebro destinado a contradecirse
no entender  así
más que el ocaso de ser un hombre
todos nuestros ocasos
predispuestos a enfrentarse
la constante lucha
saberse imperfecto
individuo
indiviyo.