La primer llamada al infierno

Ayer

rompí la ventana de mi casa por accidente.

la estaba limpiando y solo se partió.

 

Bueno, está bien

le diré la verdad;

La rompí para poder escapar

del llanto que se escucha por las noches

y de esos gritos que salen del cuarto de mamá.

Creo que mamá está enferma

se inyecta por las tardes y por las noches

y no acepta que venga el médico a revisarla,

dice que sólo necesita la medicina

que un hombre tatuado y mal encarado

le lleva a casa cada tercer día por las mañanas.

A mamá la visitan muchos hombres los fines de semana

y yo tengo que salirme del cuarto

con mi hermana en brazos mientras ella los atiende.

Papá nos abandonó hace varios años

creo que no nos amaba

¿Quién abandona lo que ama?

yo abandoné la escuela

por dedicarme a cuidar a mi hermana.

Mi hermana es pequeña, pequeñita y muy frágil,

le gusta mucho comer sopa

y que le cante y la abrigue bien

cuando nos toca dormir en la banqueta.

Creo que mi hermanita se irá pronto de casa,

tiene mucha tos y han venido unos señores

y le ofrecieron a mamá mucho dinero por ella.

 

Ayer mamá me azotó contra la mesa

dice que debo portarme bien y hacer lo que ella diga

pero yo no quiero inyectarme nada

ni beber de lo que a ella le invitan esos hombres.

La casa huele muy raro y ya me he cansado de limpiarla,

por eso rompí la ventana

dicen que la tragedia viene acompañada de malos olores

y no quiero que nada malo nos pase.

Mamá está embarazada y no tenemos papá,

creo que es un milagro

como el de esa historia que tanto cuentan en la tele

y que escuché una vez que salí corriendo

y entré a una iglesia con mi hermanita en brazos

para refugiarme de la lluvia.   

No quiero que mamá me pegue

así que salí corriendo de casa antes de que despierte,

pero me duele haber dejado a mi hermana.

No sabía a donde ir, además corrí tanto

que me he alejado mucho de casa y no sé cómo regresar,

así que vine aquí porque mamá siempre dijo

que las personas que sonríen es porque están locas,

y sé que este es un hospital para locos,

y yo quiero sonreír

y quiero que mi hermanita tambien lo haga.

Si me ayudan prometo pagarles con trabajo

sé barrer, lavar trastes, baños, pisos, cuidar bebés

y mamás enfermas, preparar jeringas

y limpiar cuando alguien se vomita.

Necesito asilo para mi hermanita y para mí.

Doctor  ¿usted me puede ayudar?

 

-Haré lo posible, pero niño,  primero dime

¿Cómo te llamas?

 

Me llamo… Nas, y tengo 8 años.