(Dedico a mi hija Gretel Sally, libre y salva en Canadá)
Por Alberto JIMÉNEZ URE
Irgo mientras aplaudo,
Durante mi «Edad Solemne»,
Que todas las hijas de venezolanos
«Anden sueltas» por el Mundo Civilizado:
Lejos de nuestra esclava, herida y asustada
[Por adventicios «socialistas-terroristas»] república.
Ninguna «ideología»,
O «Proyecto País» de hipócritas,
Vale lo que nuestras preciosas damitas […]
Ya no tenemos un Estado de nacionales:
Dejemos al estiércol cocinar [se] fétido.
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Autor:
DEMÓDOCO (
Offline) - Publicado: 12 de agosto de 2019 a las 08:26
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 32
- Usuario favorito de este poema: kavanarudén.
Offline)
Comentarios3
Delicado y sentido.
Nuestras hijas dispersas, nuestra familias en diversas partes del mundo. Maldito sistema que ha destruido lo que con creces se ha construido. No quiero perder la esperanza pero duele la distancia y la situación de nuestro pueblo querido.
Un abrazo de mi parte.
Kavi
Te acompaño en la pena, mi hija mayor emigró hacia Brasil con mis dos nietecitos... Es profunda la herida que le infringieron a nuestra amada Nación los forajidos, saqueadores y genocidas, aunados a los opositores colaboracionistas, que ante cualquier conato de paro cardíaco del régimen, inmediatamente salen en su auxilio suministrándole oxígeno con diálogos y demás formas infames darle a Venezuela una puñalada por la espalda de forma una y otra vez repetida...
Beldades dispersas por en mundo
venezolanas hermosas y aguerridas
son bienvenidas y muy queridas
desplazadas por un poder inmundo.
Nos aunamos al grito de libertad.
Con abrazo
JAVIER
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