Todo es un camino constante, cada paso cuenta, tu alma pesa, tus labios arden en confusión,
pero llega la noche y aparece la luz que quizá no encontraste en el dìa
La brisa fraudulenta retumba tu hogar tan solo, y tu proximidad se encuentra tan lejos
Me reflejo en el otro, en aquello que nubla; me reflejo y quizá todo
este tiempo mi mente ha divagado en su mar azul; quizá solo seré esta cara que hace
gestos y este pecho que a fuerzas recupera el aire
Caigo, y me envuelvo en mi nuevo vestido de jardín, y añoro esa eternidad que
fue cobarde de materializarse. Y míranos, y mírame; descúbreme
un poco, desnudo mi alma para ti, porque hay oídos
sordos que se acercan y me encuentro cansada de comenzar de nuevo
No hay miradas, no hay tacto, todo se fue bailándole a
la sutileza entre tanta gente; esta vez no
hay flores, esta vez dibújate en lo que quedó
del conformismo cuando la noche seguía y tus ojos cansados
buscaban hogar en los míos.
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Autor:
Ángela Páez A (
Offline) - Publicado: 26 de julio de 2019 a las 22:34
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 79
- Usuarios favoritos de este poema: Fernando?, Viento de amor, alicia perez hernandez, Ben-., Lualpri.
Offline)
Comentarios4
"tu alma pesa"..
mi nuevo vestido de jardín"
me agradaron estos versos...
Hermosa inspiración, sentida y significativa. Linda noche, poetisa.
Muchas gracias, compañero. Lindo dia para ti tambien.
Un gran poema en prosa, felicidades por el conjunto de tu obra, un abrazo!!
La brisa fraudulenta retumba en tu proximidad
mírame; desnudo mi alma para ti
esta vez no hay flores,
la noche me mira con sus ojos cansados
Me ha encantado en verdad es lindo mi tierna amiga.
Con mucho cariño
JAVIER
Ayy, me sigues encantando jajaja. Saludos, Javier
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